En un comunicado difundido la semana pasada, Moody’s informó que había mejorado a “B3” las calificaciones de emisor de largo plazo y de deuda sénior no garantizada de El Salvador, que además colocó en perspectiva estable, es decir, no prevé cambios en el corto plazo.
Con la nueva calificación, el país mejoró en la escala de Moody’s, dejando atrás la “Caa1” que tenía en 2017. Según Lorenzana, esto permitirá que el país pase además a colocar Eurobonos en el mercado internacional con tasas de interés de hasta un 6 %.
El representante del gabinete económico explicó que, de acceder a préstamos internacionales hace un año, el país habría pagado una tasa de interés mucho más cara; así como con la colocación de bonos.
“Seguramente la tasa de interés con respecto a la colocación que podríamos hacer ahora es una diferencia de entre dos y tres puntos. Pudimos andar colocando bonos de entre 8 % y 9 %, y ahora seguramente andarán al rededor del 6 %”, aseguró.
En 2017, el Gobierno salvadoreño emitió los Eurobonos con la tasa de interés más alta de los últimos 15 años. Los datos del Ministerio de Hacienda indican que los $600 millones colocados el 28 de febrero del año pasado pagan una tasa del 8.625 %.
Lorenzana sostuvo que esta diferencia, en términos concretos, significa un ahorro de millones para el país, y aseguró que, para asegurar tasas aún menores, es necesario que “las fuerzas políticas se pongan de acuerdo”.
“Hay que llegar a acuerdos de financiamiento a largo plazo, contratar créditos con intereses más bajos”, explicó Lorenzana, y agregó que, de aprobarse en la Asamblea Legislativa el refinanciamiento de $800 millones de Eurobonos a vencer en 2019, el país podría incluso subir su perfil crediticio a “B2”.