El ministro de Agricultura y Ganadería (MAG), Orestes Ortez, aseguró ayer que cuenta con una reserva de 15,000 paquetes agrícolas de maíz para los productores que pierdan sus cosechas por la sequía que afronta la zona oriental del país.
“Nosotros contamos con no menos de 15,000 paquetes de reserva para atender a una cantidad igual de productores (…). Quiero mandarle un mensaje claro a los productores, que todos aquellos que hayan tenido pérdidas comprobables y verificables, van a tener el acompañamiento”, manifestó Ortez durante la entrevista El Salvador Ahora, del estatal Canal 10.
Hasta ayer, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) informó que ya se acumularon 22 días secos en el norte de La Unión y Morazán, así como en el suroeste de San Vicente y Usulután. En el resto de la zona oriental se reportaron lluvias la noche del jueves por primera vez desde el pasado 22 de junio.
El ministro Ortez, por su parte, manifestó que la sequía experimentada superó los pronósticos climáticos de la institución, quien previó una canícula entre ocho o 10 días a mediados de julio. El período seco se concentra en los 104 municipios del corredor seco, sobre todo los ubicados en la zona oriental, donde las plantas de maíz ya comenzaron a secarse y muestran un retraso en el crecimiento.
“Los centros de pronósticos habían establecido que íbamos a tener este primer bloque de la estación lluviosa con cierta normalidad y con rendimientos de agua en lo normal y un poco bajo en lo normal. Se previa una canícula para mediados de julio, finales de julio, que no iba a ser mayor de ocho a diez días”, manifestó.
Medidas
La Dirección General de Protección Civil informó ayer que en una reunión sostenida entre el MAG y dicha institución se tomó la decisión de construir un distrito de regadío en Santa Ana y habilitar en ocho municipios de San Miguel y La Unión los sistemas de riego por goteo.
Además, Ortez detalló que el MAG está en la última fase para la compra de 50,000 paquetes de frijol, por un costo cercano a $1.7 millones, y aseguró que iniciarán el proceso de entrega en los primeros días de agosto próximo.
A diferencia de 2015 y 2016, cuando el fenómeno de El Niño golpeó a El Salvador, la sequía experimentada en los últimos días se debe al enfriamiento de las aguas en el Océano Atlántico y un calentamiento en el Pacífico. Esto genera vientos alisios que disipan la formulación de lluvias.