Fotos DEM-Óscar Machón


Tonacatepeque quedó a oscuras y en sus calles se dejaron escuchar gritos y llantos de personajes mitológicos durante la tradicional celebración del “Día de la Calabiuza”, que se celebra cada años el 1 de noviembre, en la víspera del Día de los Difuntos.

Durante esta tradición se revive el pedir calabaza o ayote en miel como una costumbre que año con año se realiza en el municipio de Tonacatepeque al norte de San Salvador.

La Llorona, El Gritón de Medianoche,La Siguanaba, El Cadejo, El Padre sin Cabeza, El Justo Juez de la Noche,El Diablo,La Chancha y otros personajes recorren esta noche el casco urbano de Tonacatepeque repitiendo el estribillo: “Ángeles somos, del cielo venimos,pedimos ayote para nuestro camino… mino".



Esta tradición y expresión cultural de la celebración a La Calabiuza se remonta a la época precolombina, la que ha logrado mantenerse vigente hasta la actualidad gracias al compromiso de los habitantes de Tonacatepeque y al apoyo de las autoridades municipales.

Su realización únicamente se vio interrumpida durante los años del conflicto armado en la década de los años 80, pero tras ser retomada en años posteriores la celebración ha sido modificada con el aporte de las nuevas generaciones, con nuevos bríos.

Esta noche propios y foráneos se han encargado de interactuar con los turistas a través del también infaltable reparto de ayote en miel, que horas antes fue cocinado en grandes ollas por ahora dispuestas el Parque Central, en donde el susto de calma con un dulce trozo de la conserva.

Al final del terrorífico desfile la comuna premió a las mejores carretas chillonas y personajes mitológicos que asombraron a propios y extraños que vivieron el "Día de la Calabiuza".

500 ayotes para los visitantes
La alcaldía del municipio de Tonacatepeque compró unas 500 calabazas o ayotes para repartir a los visitantes que llegaron para compartir esta costumbre.

La municipalidad financió la cocida de ayotes en miel, ofrecidos a los visitantes, como tradicionalmente se instalan, en grandes peroles dispuestos en el Parque José María Villafañe.

Desde la 5:00 de la tarde colaboradores de la alcaldía comenzaron el reparto de este platillo típico.