A pesar que la alcaldía municipal y el Cuerpo de Bomberos exigieron a los comerciantes las medidas de seguridad para el control de manejo y ventas de pólvora instaladas en las afueras de la iglesia católica de Usulután, algunas de éstas no cumplen con lo establecido.
El alcalde municipal, Mauricio Zelaya, autorizó 80 puestos de venta de pirotécnicos en la referida ciudad y dijo que los comerciantes ya conocen de las medidas del uso y manipulación de la pólvora.
La comuna coordina con los bomberos, Fuerza Armada y la Policía Nacional Civil la seguridad de los comerciantes y a los vendedores se les ha dado a conocer que no tienen que llevar menores de edad donde se han instalado los puestos. En uno de los puestos donde se comercializan pirotécnicos había una madre amamantando a su hija menor de un año, ayer.
El edil dijo que no se permite que fumen cerca del lugar autorizado, “previniendo que ocurra una desgracia y para resguardar el patrimonio de la iglesia católica ya que sabemos que su estructura es de madera”, dijo Zelaya.
El alcalde explicó que buscaron otras opciones para poner las ventas, pero la directiva de vendedores se negó por temor a robos de mercadería.
Una de las vendedoras dijo que nuevas comerciantes no cumplen con medidas de seguridad y que no tienen la licencia para la venta y muchos no han asistido a las charlas para obtener los permisos.