“Los colegios privados no podríamos, después de que este subsidio se esté terminando en plazo de dar a los colegios privados, no podríamos asumir este aumento al salario mínimo en ningún momento, con las actuales colegiaturas que estamos cobrando”, sostuvó Javier Hernández, presidente de Acpes.
Hernández explicó que de mantener las actuales colegiaturas no podrán “asumir como empresa el salario mínimo”.
Sin embargo, el presidente de la asociación descartó que se esté pensando en aumentar la colegiatura en el sector privado, recordó que para que esto proceda los padres de familia deben de dar su visto bueno en cada institución privada del país catalogada como “con fines de lucro”.
En torno a lo anterior surge la preocupación para la asociación porque solo visualizan dos caminos: el primero que quien asumirá será el consumidor, o lo segundo que lo recaiga en la empresa, y en el caso de las instituciones educativas privadas serán estas mismas las que asumirán la responsabilidad.
“Y en el caso nuestro, si lo asume la empresa, la empresa quiebra, y si lo asume el consumidor, no hay manera que lo asuma en los colegios privados, porque tiene que pasar por un proceso en donde el padre de familia tiene que autorizar asumir ese incremento”, explicó Hernández. Lo que los colegios privados esperan es que este aumento al 20 % del salario mínimo funcione como un “efecto dominó”, en donde cuando el padre de familia adquiera más ingresos decida matricular a sus hijos en el sector privado, generando ingresos para costear el aumento al sueldo de los empleados.