El presidente de Fusades, Miguel Ángel Simán, lideró ayer un foro con el Bush Institute para la creación de una agenda digital de El Salvador. / Cortesía Fusades


El director del Bush Institute, Matt Rooney, indicó ayer que en la realización de una agenda de desarrollo digital para El Salvador es fundamental incluir la lucha contra la corrupción e informalidad.

“Tenemos la impresión y estamos convencidos que los servicios digitales móviles y el acceso a servicios gubernamentales y financieros, por tecnologías móviles y digitales, ponen una transparencia en nuestros sectores. Además, disminuyen las oportunidades de corrupción y los costos de incumplimiento, con los diferentes elementos laborales y corporativos”, explicó Rooney en un foro organizado este miércoles por la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades).

Los expertos en el tema consideran que la creación de dicho material debe ser una de la prioridades de El Salvador, ya que ayudará en el desarrollo digital y facilitará la interacción de los ciudadanos con el Estado.

El presidente de Fusades, Miguel Ángel Simán, explicó que es necesaria la realización de una agenda de desarrollo digital, pues ayudará a reducir trámites y costos, transparentar servicios y, sobre todo, brindar competitividad y productividad.

Simán agregó que ayudará a generar oportunidades de empleo y que se mitiguen las causas de la migración con destino a Estados Unidos.

El uso de las tecnologías en general ha demostrado que facilita y dinamiza la economía de un país y que a su vez genera un crecimiento económico y oportunidades de empleo para la población.

“En este caso nos dimos cuenta que si queremos potenciar la economía, tenemos que generar mayores niveles de competitividad y productividad. Eso se logra con simplificar los procesos tradicionales e implica el uso de las tecnologías para poder potenciar la competitividad y productividad que necesitamos” aseguró el presidente de Fusades.

En El Salvador se tiene tecnología a la disposición, pero no existe una política enmarcada y focalizada que permita potencializar su uso y, a su vez, generar crecimiento económico.

El ejecutivo de Fusades, citando datos del Banco Mundial, explicó que al lograr incrementar el 10 % del uso de las tecnologías podría generarse casi automáticamente un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del 1.4 %.

Existen distintos indicadores que demuestran que El Salvador se ha quedado atrás en el tema tecnológico. El Índice Global de Competitividad, en el pilar de la Adopción de Tecnologías de Información y Comunicación, coloca al país en la posición 105 de las 140 economías evaluadas.

Simán aseguró que hay varias desventajas en la capacidad local para absorber tecnologías y, pese a que en el país existen más celulares que personas, apenas 31 % de los ciudadanos usa Internet, lo que ubica al país en la posición 123 del ranking mundial en el tema de habilidades digitales.