El cordón de seguridad fue establecido desde el pasado miércoles. / Cortesía César Sanabria


Tres farmacias abiertas, un mercado cerrado, calles solas y supermercados llenos, ese era el ambiente de ayer por la mañana en Metapán, la ciudad calera que desde el pasado miércoles por la noche es vigilada por la Fuerza Armada y la Policía Nacional Civil (PNC), tras el ser el foco de infección donde se confirmó el primer caso de coronavirus en el país.

El paciente número uno registrado por las autoridades con Covid-19 viajó a Italia e ingresó a El Salvador por un punto ciego fronterizo. La noticia la dio el presidente de la República, Nayib Bukele, el miércoles por la noche. El mandatario aseguró que esta persona es originaria de Metapán y fue atendida en el hospital nacional de esa ciudad.

La información viajó rápidamente en la tierra de los jaguares, algunos habitantes y trabajadores que iban de paso intentaron abandonar esa misma noche la cuna de Jorge “Calero” Suárez, pero no tuvieron éxito; otros, en tanto, decidieron no salir y quedarse en casa. Ayer, las calles permanecían “desoladas”.

“Ahorita está varado el pueblo, detenido en el tiempo, parece un día como primero de enero, bien solas las calles”, afirmó a Diario El Mundo Juan Carlos Cortez, locutor de radio La Campirana, de Metapán, quien ha quedado encerrado entre los caleros debido al cordón de seguridad de 48 horas establecido por Bukele, que impide las entradas y salidas del municipio.

“También hay restricción para la gente que viene de los cantones y caseríos, no puede entrar a la ciudad; o sea, en todas las entradas de zonas rurales hay retenes”, señaló.

Cortez es originario de Santa Ana, debía salir de la ciudad calera ayer y no pudo hacerlo. Indicó que había “bastante patrullaje en Metapán de soldados y policías”.

Por la mañana el ambiente no era habitual, el locutor repitió que las calles permanecían solas, pero los supermercados estaban llenos. “De 12 farmacias solo hay tres abiertas”, agregó.

Durante la mañana y la tarde, el parque y las calles de Metapán estaban desolados. / Cortesía Juan Carlos Cortez


El alcalde municipal, Rigoberto Pinto, pidió al presidente Bukele dotar al municipio de víveres, mascarillas y permitir el paso de insumos para que el personal designado de la alcaldía lo traslade a lugares establecidos.

“Nos sentimos bastante preocupados porque no hay mascarillas ni alcohol gel. Todos prefieren estar resguardados en sus casas”, destacó Heidi Chinchilla, jefa de la Unidad de Adquisiciones y Contrataciones Institucionales (UACI) de la alcaldía de Metapán.

“Ahora está abierta la despensa y el súper, el mercado está cerrado y la alcaldía también”, explicó.

La situación es igual en la mayoría de calles de la ciudad calera. “Sé que solo los supermercados están abiertos y había bastante gente en la mañana. Las autoridades piden que no haya aglomeraciones y con la ayuda de la policía se está tratando de regular eso”, destacó Rafael Morataya, directivo del club deportivo de primera división, Isidro Metapán.

A primeras horas de la mañana, un médico que atiende en el sector público y privado se dirigía hacia Metapán a brindar consultas. El galeno, que pidió anonimato, explicó que el paciente diagnosticado con coronavirus ingresó el domingo al hospital nacional, luego de haber ido a un hospital privado. El paciente estuvo en el área de Emergencias y hasta el miércoles se le hizo la prueba.

El médico lamentó el retraso y señaló que el director del nosocomio ha dicho al personal que les “descontará sino se quedan” en el centro hospitalario. Los galenos no iban preparados.