Migrantes centroamericanos en la frontera de México con Estados Unidos./Europa Press.


Al menos 233 siete niños y adolescentes hondureños se aventuraron a viajar solos a Estados Unidos durante el mes de enero, lo que arroja una media diaria de siete, según datos de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (DINAF) del país centroamericano que se han conocido este martes.

Tania Padilla, del Programa Migración y Restitución Internacional de Niños, Niñas y Adolescentes, que depende de la DINAF, indicó que tienen constancia de que solo en enero 699 menores de edad partieron de Honduras rumbo a Estados Unidos.

La cifra real sería mayor porque, tal y como explicó Padilla en declaraciones recogidas por el diario hondureño 'El Heraldo', este dato se refiere únicamente a los menores de edad que fueron repatriados desde México y Guatemala.

Del total de menores retornados, 466 habían viajado acompañados de adultos, ya fueran sus padres u otros familiares, mientras que 233 lo hicieron totalmente solos, esto es, una media de siete al día.

A ellos se suman otros 429 menores que fueron repatriados desde México y Guatemala pero que viajaron de manera legal, lo que supone "un total desde principios de enero hasta la fecha de 1.128 niños retornados".

"Debido a que la DINAF desplazó personal a los puntos fronterizos a causa de la segunda caravana que se organizó desde San Pedro Sula, se pudo desarticular la intención de viajar de forma irregular, por lo que no se permitió la salida de apenas nueve niños", contó.

Padilla indicó que estos niños y adolescentes regresaron con problemas de salud, sobre todo dolencias estomacales, infecciones respiratorias y picaduras de insectos, sin contar con el impacto psicológico.

Honduras se convirtió en octubre de 2018 en el punto de partida de las llamadas caravanas centroamericanas, con las que miles de ciudadanos hondureños, guatemaltecos y salvadoreños intentaron conquistar el 'sueño americano'.

La Administración de Donald Trump logró frenar el flujo forzando acuerdos migratorios con los países de origen y con México, país de tránsito, pero en los últimos meses han partido nuevas caravanas.

Naciones Unidas y las ONG han alertado de que la migración ilegal no cesará hasta que se resuelvan sus causas profundas, que en el caso del Triángulo Norte --Honduras, Guatemala y El Salvador-- son la violencia, la pobreza y la falta de oportunidades.