En 11 años, las alcaldías salvadoreñas cuadriplicaron sus deudas y el 60 % de esos recursos se han utilizado para pagar compromisos financieros pasados, señaló ayer la Fundación Nacional para el Desarrollo (Funde).

La Funde presentó ayer un estudio sobre la situación de las finanzas municipales, donde analiza los ingresos, gastos y deudas de las comunas, así como el uso del Fondo para el Desarrollo Económico y Social de los Municipios (Fodes) y la factibilidad de implementar un impuesto predial, manejado por las alcaldías.

Utilizando datos del Ministerio de Hacienda, disponibles para 246 alcaldías, el informe indica que en 2006 la deuda municipal sumó $123 millones, pero 11 años más tarde, en 2017, alcanzó $514 millones.

Rommel Rodríguez, analista del tanque de pensamiento, señaló que en ese periodo la deuda de las comunas se cuadriplicó, mostrando un crecimiento más acelerado que la del Sector Público No Financiero (SPNF, compuesto por el Gobierno y las empresas públicas no financieras). En ese periodo, los compromisos del SPNF se multiplicaron por 2.3.

 

¿En qué se utilizan los recursos?

El estudio de la Funde muestra que el 60 % del dinero prestado entre 2015 y 2017 se utilizó para refinanciar deudas pasadas. Solo el 26 % se utilizó para inversión y el resto para proyectos diversos.

Precisamente por el alto endeudamiento han aumentado los gastos financieros, relacionados al pago de intereses. En 2012, el 5.1 % del gasto municipal correspondió a este rubro, pero para 2016 abarcó el 8.6 % del total.

El crecimiento constante de la deuda municipal contrasta con un magro crecimiento de los ingresos propios de las comunas: entre 2016 y 2019 aumentaron 1.8 veces. Además, los gobiernos locales no son muy eficientes para recolectar tributos: entre 2012 y 2016, solo en tres años se logró cumplir la meta de recaudación, indicó Rodríguez.

En un contexto de deudas onerosas y bajos ingresos propios, la dependencia al Fodes es alta en todos los municipios. Solo los pertenecientes al departamento de San Salvador y La Libertad financian más del 50 % de sus gastos con ingresos propios.

No obstante, el 80 % de las comunas no respetan el mandato del Fodes, que es destinar el 75 % de esos recursos a la inversión. En 2016, el gasto de capital presupuestado por las alcaldías fue de $265.5 millones, que coincidió con la asignación del Fodes para inversión. Sin embargo, al final de ese año solo se invirtieron $119 millones.

El Fodes es una transferencia que proviene de los recursos del Gobierno Central. Cada año, por ley, se le debe entregar a las 262 comunas del país el equivalente al 10% de los ingresos corrientes del Gobierno.