La Dirección General de Protección Civil emitió, la tarde de este sábado, alerta amarilla en 40 municipios y verde en otros 222 por el alto riesgo que existe en el territorio salvadoreño debido a la acumulación de humedad en los suelos a causa de las lluvias que han azotado al país y por el pronóstico de la continuidad de las tormentas, para las próximas 48 horas.

Jorge Meléndez, titular de la institución, indicó que las lluvias que se han registrado desde el pasado jueves han tenido una duración de entre cinco a seis horas en algunas zonas como el volcán de San Miguel, volcán de San Vicente y zona costera desde San Miguel hasta Sonsonate.

Los municipios bajo alerta amarilla son: San Miguel, Chinameca, San Jorge, San Rafael Oriente, El Tránsito, Chirilagua, Concepción Batres, Jucuarán, San Dionisio, Puerto El Triunfo, Jiquilisco, San Vicente, Guadalupe, Verapaz, Tepetitán, San Cayetano Istepeque, Tecoluca, Conchagua, La Unión, Santa Rosa de Lima, Pasaquina, Santo Tomás, Santiago Texacuangos, Panchimalco, Rosario de Mora, Zacatecoluca, San Juan Nonualco, San Luis La Herradura, Comasagua, Huizúcar, Zaragoza, San José Villa Nueva, Puerto de La Libertad, Tamanique, Chiltiupán, Teotepeque, Jicalapa, Sonsonate, Santa Isabel Ishuatán y Acajutla.

El resto de los municipios del país permanecerán en alerta verde. Protección Civil recuerda que en la zona del volcán Chaparrastique se mantiene vigente la alerta naranja.

 



La institución indicó que las comisiones municipales y comunales deben permanecer atentas ante cualquier situación de evacuación que pudiera requerirse y de asistencia a los pobladores que puedan resultar afectados por las emergencias.

La declaratoria de Protección Civil también señala que las alcaldías de los municipios ubicados en la zona costera deben activar un sistema de monitoreo en los lugares con mayor riesgo a deslizamientos de tierra, desbordamiento de río y bocanas.

Asimismo, hace un llamado a la población a mantener limpios los sistemas de drenajes de sus viviendas y colonias, no lanzar basura a ríos o quebradas, ni a las calles, para evitar que se registren inundaciones. También recomienda asegurar los techos frágiles y reportar cualquier inestabilidad de árboles o ramas.