El exfuncionario fue señalado por corrupción alegando que era la máxima autoridad del Ministerio de Salud cuando sucedieron los hechos entre 2007 y 2009. Foto: @FGR_SV
El exministro de Salud Pública, Guillermo Maza Brizuela y ocho imputados más acusados de varios delitos de corrupción cometidos en la construcción de los hospitales San Pedro de Usulután y Santa Gertrudis, de San Vicente entre 2007 y 2009 fueron absueltos al
no demostrarse su participación delictiva en los hechos atribuidos, según falló el Tribunal Tercero de Sentencia de San Salvador.Los jueces por unanimidad, resolvieron que por "insuficiencia probatoria”, los nueve acusados en el proyecto Reconstrucción y Equipamiento de la Red de Hospitales Públicos (RHESSA) eran absueltos por los delitos
negociaciones ilícitas, falsedad ideológica y estafa agravada.Solo en el caso de
Ricardo Humberto Barrera Alemán, un ingeniero que participó en la obra, pero que como garante de la supervisión de la misma, insertó información falsa en las estimaciones de avances que mensualmente presentaban y
César Orlando García Herrera, apoderado de la empresa supervisora, quien certificó una serie de "créditos fiscales” que sirvieron de engaño para que para que el Ministerio de Salud pagara más de $600,000 por trabajos no desarrollados.Por esa participación delictiva, el tribunal le impuso la pena de cuatro años y seis meses de prisión a cada uno.
Dos de once procesados fueron sentenciados por estafa agravada a cuatro años y medio de cárcel. Foto: Archivo
Por su parte, Fiscalía aseguró que no compartía el fallo que había emitido el Tribunal Tercero de Sentencia y que analizarían toda la argumentación que habían hecho los jueces para evaluar si apelaban la decisión judicial. Sin embargo, los jueces concluyeron que "hubo doble persecución”, pues él ya había sido procesado por los mismos hechos solo que por un delito diferente; "actos arbitrarios”, y en esta ocasión por ”negociaciones ilícitas”.El fiscal del caso afirmó que Maza era procesado en este juicio por haber llegado a un acuerdo conciliatorio con CPK, con Gerardo Enrique Osegueda Giner, su representante legal, avalado por el conciliador."Yo me siento contento y feliz; en segundo lugar complacido porque la justicia ha funcionado… Desde antes de la audiencia dije que me ha había causado una muerte civil… Yo esperaba un juicio justo… Todos los que somos imputados por alguna cosa, eso es lo que esperamos”, fueron algunas de las palabras del exministro Maza, poco después de escuchar el fallo que lo favoreció. En todo el proceso judicial, Fiscalía siempre le reprochó al ministro Maza Brizuela, que él era el principal responsable de las irregularidades que se habían dado en la construcción de los hospitales San Pedro y Santa Gertrudis mediante el proyecto Rhessa, porque él era la máxima autoridad que aprobaba o desaprobaba cualquier acción.También le cobró que haya avalado una conciliación por ajustes de precio en la construcción de los hospitales por más de $1.7 millones que la contratista atribuía a la crisis financiera internacional registrada en 2008, donde los precios del cemento, el hierro y otros insumos de la construcción se habían disparado.Otra insatisfacción para el ministro Maza fue que haya aprobado la modificación del "sitio de la obra”, con lo que los materiales para la construcción, maquinaria y equipo médico no solo se llevara a las bodegas del plantel central donde se construían los hospitales sino en las bodegas de la contratista y subcontratista.A juicio de la Fiscalía, todo eso contribuyó para que se cobrara y se pagara por parte del Ministerio de Salud la compra de equipo u otros insumos sin haber ingresado al sitio de la obra, al igual se autorizó las estimaciones de los avances de la obra, cuando todo era falso.
Otros de los imputados
Wilfredo Aponte Cuellar fue otro de los nueve que quedaron en libertad en este juicio, él fue procesado por ser el conciliador ante la contratista Copreca y el proyecto Rhessa del Ministerio de Salud para ajustar en más de $1.7 millones el costo de la construcción del hospital San Pedro de Usulután en 2008.Los jueces afirmaron que Fiscalía no presentó el informe de la conciliación, ni otra justificación para demostrar la actuación ilegal de Cuellar.Cuellar, una persona cercana a los 90 años de edad, manifestó que estaba satisfecho con el fallo que absolvía. "Desde un principio me consideré inocente, no hubo prueba y esto me causó serias molestias de salud”.Su abogado, Juan Carlos Fuentes, dijo que aunque tarde, se ha hecho justicia en el caso del señor Cuellar. "Fiscalía pretendió que la conciliación era el origen de las supuestas anomalías del proyecto Rhessa, tanto que la conciliación no se pudo demostrar que fuera el problema ni mucho menos las anomalías”.