Una de las sobrevivientes busca entre los nombres el de sus familiares asesinados. Foto: Rosa Fuentes
Óscar Leonel Tobar Claros, presidente de la Asociación Promotora de los Derechos Humanos de El Mozote, asegura que
perdió a 25 familiares, entre ellos sus abuelos, hermanos y primos, en la masacre cometida en el caserío El Mozote y lugares aledaños, en Morazán. En ese entonces él tenía 11 años y presenció las atrocidades que les hicieron a sus familiares, mientras él se encontraba en un barril escondido. Desde ahí escuchó los quejidos de sus familiares y el llanto de sus hermanos y otros familiares que fueron masacrados por el ejército salvadoreño. María de la Cruz Guevara, de 75 años, es otra sobrevivientes de la matanza.
Entre lágrimas contó que vio cómo los soldados asesinaban a sus familiares, entre ellos una hermana que recién había dado a luz a una bebé. El procurador para la Defensa de los Derechos Humanos, Apolonio Tobar, llegó hasta El Mozote para
conmemorar el 39 aniversario de la masacre de cerca de mil personas. El procurador detalló que según el informe oficial, existen 11 cuerpos encontrados en 2019 y que no han sido entregados por Medicina Legal para identificarlos y que puedan ser enterrados.
Por su parte, David Morales, abogado acusador del caso, dijo que éste
se encuentra en un proceso bastante avanzado, en la etapa de instrucción. También lamentó que no se pudiera ingresar a las instalaciones militares para inspeccionar los archivos relacionados a la masacre.