MS extorsionaba hasta $15,000 semanal en el centro

El programa Centro de la Mara Salvatrucha (MS) ha extraído del Centro Histórico de San Salvador de $10,000 hasta $15,000 semanales de extorsión, reveló ayer, un investigador policial en el segundo juicio que esa estructura enfrenta en el Tribunal Especializado de Sentencia "C” de San Salvador.También explicó que ese dinero va a una mujer que como fachada tiene una mueblería en las cercanías del mercado Cuscatlán de San Salvador y para no acumular mucho efectivo, semanalmente lo remesa a través de un encargado que es trasladado por un taxista que tiene como destino, un palabrero que reside en el municipio de Nahulingo, Sonsonate.La fiscal del caso manifestó que el chantaje de la MS es generalizado, incluyendo a los distribuidores de mercadería, transporte de carga, depósitos de bebidas, taxistas, picacheros y rutas de buses.Cada vendedor debe dar al programa Centro entre $50 y $350 por semana, quincena o mes. El caso fue denunciado a las autoridades porque la MS cada vez incrementaba el monto a los vendedores y llegaron a un punto que ya no podían reunir la suma de dinero exigida desde 2012 a la fecha.Una de esas víctimas fue clave Martín, un pequeño comerciante de los contornos del mercado Central quien denunció el flagelo, el 13 de agosto de 2019 en la División Especializada contra el Crimen Organizado (DECO). Explicó que la empezaron extorsionando con $20 semanales y después le subieron a $40, dinero que entregaba en uno de los parqueos del mercado Central a un pandillero solo conocido por su alias "Shuki”.A raíz de este y otros casos, la Fiscalía solicitó la autorización de la intervención telefónica a 27 números de celulares con los que chantajeaban a los comerciantes del centro de San Salvador, explicó la fiscal del caso.Esas intervenciones fueron realizadas por un año entre enero de 2019 y febrero de 2020, y que terminó con la captura de 54 personas, 47 de ellas ahora enfrentan el juicio.El investigador afirmó que el programa "Centro” es toda una estructura activa, piramidal y jerárquica con roles claramente definidos asentada en el centro de San Salvador y que opera en esa zona y tiempo definido; además, es integrada por colaboradores, ‘homeboys’, corredores de clicas y ranfleros; esta última es la categoría mayor.  

Clave Martín denunció las extorsiones ante la Divisón Especializada contra el Crimen Organizado (DECO), de la PNC.