Agricultores en el cantón San Andrés, de San Miguel, inician sus siembras de frijol y maíz. Usualmente, los productores de oriente cultivan hasta agosto debido a la sequía de junio o julio. / DEM
Confiados y con altas expectativas de que el invierno sea generoso este 2020, así inician los productores de oriente a cultivar maíz y frijoles por temor a quedarse sin alimentos si la crisis del COVID-19 se prolonga."La crisis está tremenda”, dijo Juan Pablo González, un agricultor del cantón San Andrés de San Miguel, mientras labraba la tierra para comenzar a sembrar. "La gente no tiene que comer y es necesario sacar la cosecha porque ya tenemos escasez, hay gente que necesita frijolitos y maíz para las tortillas, le colaboramos con la reserva que tenemos todavía”, comentó.Conforme avanza el nuevo coronavirus en las economías se eleva el riesgo de una ruptura en la cadena de abastecimiento de alimentos. Se estima que la crisis empuje a la inseguridad alimentaria aguda a 300,000 salvadoreños de la región oriental, según la Red Mundial Contra las Crisis Alimentarias.Ese temor ha motivado que productores de la región oriental se adelanten con la siembra de granos básicos, confiados en que "el invierno será muy bueno para sacar buena cosecha”, sumó González.En El Salvador, el ciclo agrícola inicia con las primeras semanas de mayo en el período que se conoce como "primavera”. Los productores de la región central y occidental comienzan a preparar la tierra con las primeras lluvias, mientras que los de oriente suelen esperar a la siembra postrera por temor a que la canícula, que suelen presentar entre junio y julio, se extiendan y termine destruyendo los cultivos.Para 2020 no se descarta una canícula, según el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), quien prevé una disminución de lluvias en julio y que podría llegar a una sequía meteorológica de débil a moderada por la presencia del fenómeno El Niño."Nos advirtieron que sembráramos hasta julio porque habrá sequía, pero la necesidad es más que lo que predice el hombre”, remarcó Matías Martínez, agricultor del cantón El Volcán, San Miguel.Pese a ese riesgo, los productores han comenzado a cultivar con recursos propios pues el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) aún no entrega los paquetes agrícolas ante la cuarentena especial. El temor a contagios también ha ocasionado problemas, aseguró Pablo Durán Segovia, de San Miguel, al explicar que no logran encontrar trabajadores dispuestos a sembrar."Nadie quiere salir porque la gente tiene miedo y no quiere trabajar en la tierra. Tienen miedo que se los lleven a cuarentena pero es necesario que sembremos para sacar alimento”, sumó el agricultor.