Ana Castillo es madre soltera y ha sacado adelante a sus dos hijas sin la ayuda “de nadie”. Aseguró que por años pagó entre $125 a $150 por el alquiler de una casa en Santa Ana, sin la posibilidad de tener una vivienda propia. “Fueron tantas que hasta perdí la cuenta, pero, lo bueno es que ya no alquilaré más”, enfatizó ayer.

Castillos se dio cuenta del proyecto del Fondo Social y no dudó en buscar información. Optaron por un apartamento familiar en la residencial Santa Lucía, siempre en Santa Ana.

El apartamento cuenta con tres habitaciones, una sala, un comedor y dos baños. Por un período de 25 años, indicó la salvadoreña, pagará una cuota de $90 mensuales, cifra que “es algo accesible” para su bolsillo.