Las mascarillas de tela cuestan entre 0.50 centavos y $1.00 indicaron las vendedoras. / DEM


En tiendas y mercados de los municipios de San Salvador y Soyapango se ha disparado la oferta de mascarillas de tela artesanales, una opción más económica -aunque menos segura- para protegerse del coronavirus, según los comerciantes informales.

Desde las 8:00 a.m., Cecilia de Ayala, abre su tienda, donde comercializa productos alimenticios, comida para gatos y perros, pan, insumos de limpieza personal, churros y también mascarillas artesanales porque sus clientes lo demandan para trasladarse con tranquilidad dentro de su comunidad.

“Yo vendo mascarillas impermeables que van desde50 y75 centavos. Las compro hechas y los clientes me las compran porque aquí les exigen los agentes (de la Policía) andar con mascarilla para que salgan a comprar sus alimentos para andar protegidos”, explica Cecilia a Diario el Mundo.

Mientras que en otro recinto de la comunidad, la encargada de las ventas explica escuetamente que habitantes las solicitan para evitar ser contagiados de coronavirus. En esta tienda la mascarilla tiene un valor $1.

Pero en el mercado la Tiendona, los comerciantes de las mascarillas se multiplican y en su mayoría son mujeres las que buscan obtener dinero para sostener sus hogares durante la cuarentena domiciliar decretada el pasado 21 de marzo.

La oferta de ese insumo se encuentra entre $0.50 las más sencillas y $1.00 con filtro y decoraciones. “Vendemos mascarillas de la profesional, son de tela pero tienen el filtro que protege, estos días estuvo la venta bastante buena y esperamos seguir vendiendo” dijo Elizabeth Mejía quien conduce su carretón donde también carga medicamentos.

Algunos hacen sus compras, caminan entre vendedores que gritan ofreciendo frutas, verduras, carnes y lácteos pero Yaneth quien es vendedora ambulante, grita ofreciendo unas pocas mascarillas de colores, empaquetadas en bolsitas de plástico.

Según Yaneth las ventas bajaron ayer debido a que las autoridades Salud y medios han señalado que el insumo no protege de coronavirus.

“Hay bastante gente que no ha comprado ya porque han señalado que no sirven pero las mascarillas que vendemos no dan calor y la gente se protege”, aseguró Yaneth.

Los vendedores de Soyapango, en tanto, ofrecen mascarillas de tela artesanal, concentrados en las filas interminables de personas que buscan entrar al supermercado más grande del municipio.

Con diseños especiales para niños y adultos, todos por $1, buscan llamar la atención de madres y padres de familia que quieren proteger a sus familias con la precaria prenda.

“Yo tengo un amigo médico, él me ha dicho que también funcionan”, asegura un hombre con muletas, que también vende guantes de látex, individuales, en bolsas plásticas.

Ofrece, para garantía de incautos clientes, un “diseño especial” con filtro incorporado, también por $1. “Estas se lavan todos los días, se planchan y se ponen, quedan como nuevas”, intenta convencer.

Esta semana el viceministro de Operaciones en Salud, Francisco Alabí reiteró que el uso de mascarillas es para pacientes que tienen síntomas gripales o relacionados al coronavirus.