El paso fronterizo El Poy fue el primero en integrarse a la unión aduanera. /DEM


El Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) aprobó una cooperación de $750,000 para incorporar a El Salvador al proceso de Unión Aduanera Regional.

Esta cooperación es de carácter no reembolsable y se destinaría al programa que ejecuta la Dirección General de Aduanas (DGA) sobre la “Incorporación de la República de El Salvador al Proceso de Integración Profunda hacia el Libre Tránsito de Personas y de Mercancías Iniciado entre las Repúblicas de Guatemala y Honduras”.

El banco regional indicó que los recursos servirán para modernizar, innovar y agilizar los procesos aduaneros a través de mejoras en la infraestructura física y tecnológica bajo la responsabilidad de la DGA, a fin que le permita agilizar el comercio regional.

El BCIE propicia “de manera efectiva la integración regional, financiando preferentemente iniciativas regionales con impacto en dos o más países”, indicó Dante Mossi, presidente ejecutivo del Banco.

El país inició en 2018 el ingreso a la unión aduanera del Triángulo Norte -El Salvador, Guatemala y Honduras- al entregar el Protocolo de Adhesión de El Salvador al Sistema de la Integración Centroamericana (SICA). Para enero de 2019 se iniciaron las pruebas del primer puesto fronterizo integrado.







Los puestos fronterizos integrados cuentan con Centros de Facilitación del Comercio para agilizar el paso de mercancías y también incluye Centros de Control para atender a los bienes exceptuados de la libre circulación.

El Salvador se incorporó así a la unión aduanera que entregó en vigencia en 2017 entre Guatemala y Honduras, tras años de negociaciones para homologar los trámites de tránsito de mercancías y personas.

La anterior administración del Ministerio de Economía (Minec) aseguró en mayo de 2019 que la integración de El Salvador quedaría un avance del 95 %; luego, en julio de ese mismo año, la nueva Dirección General de Aduanas indicó que revisaría los términos para sumarse, pero hasta la fecha no se ha indicado cuál es el avance de dicho proceso.

El BCIE recordó que en 2016 también otorgó cooperación no reembolsable por $1.5 millones a dicho proceso que “hasta el momento ha sido sumamente exitoso”.

La unión aduanera de las tres economías representa más de 32.1 millones de habitantes y equivale al 73.1 % de la población de Centroamérica, que en conjunto mueven el 69 % del comercio regional. Esto convierte a la región en la octava economía fuerte de América Latina, según datos del SICA.

Con una unión aduanera, se elimina de manera progresiva los aranceles entre los socios y se estimula la inversión al considerarse un mercado más grande que los países por aparte.