La crisis económica resultante de la pandemia del Covid-19 amenaza con llevar al Producto Interno Bruto (PIB) de El Salvador a su mayor contracción en la historia reciente. De acuerdo con una estimación preliminar del Banco Central de Reserva (BCR) la economía puede desplomarse hasta el -4 %, en su su peor escenario.

“El Banco Central de Reserva se encuentra evaluando el impacto sobre las diferentes ramas de la actividad económica y sobre el gasto interno y externo del país, recabando insumos de sus distintas fuentes de información. No obstante, de acuerdo con las perspectivas divulgadas por organismos internacionales, el país podría enfrentar una contracción económica en un orden superior a la crisis experimentada en 2009”, describe la entidad en un comunicado donde recalca que esta primera proyección hay un rango que va del -2 % hasta el -4%, la cual se hace con información “muy preliminar y dinámica” por lo que seguirá monitoreando las condiciones para ofrecer estimaciones más precisas.

El análisis está en sintonía con una primera valoración hecha por la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades) y por el banco inglés Barclays que prevén que la caída sea de -3.5 % y -3 %, respectivamente.

Fusades considera que la economía mundial enfrenta un shock sin precedentes por lo que urge a hacer un balance en la contención de la pandemia en el campo sanitario, pero también en el económico.

“Estamos viviendo momentos históricos en esta pandemia del Covid-19 que no habíamos experimentado las generaciones de nuestra época, desde en el punto de vista de la salud pública. Esto exige tomar medidas para frenar el impacto del virus en la economía”, advirtió Álvaro Trigueros, director del Departamento de Estudios Económicos de Fusades.

El economista sostiene que la pandemia es un fenómeno mundial que los organismos internacionales han reconocido que -por primera vez desde la década de 1930- llevará a la economía mundial a una recesión, la cual entidades como el banco estadounidense Wells Fargo ya cifran en -2.6 %.

Pedro Argumedo, economista senior del Departamento de Estudios Económicos de Fusades, explica que a diferencia de crisis previas esta es de carácter global y ataca tanto a la producción como a la demanda.

“Este fenómeno es un shock que está en curso (...) los primeros afectados son turismo y transporte aéreo y luego viene el aparato industrial que se ha visto golpeado por la proveeduría de materias primas y los cierres a nivel mundial de plantas por la estrategia de distanciamiento social”, dijo el investigador que anticipa otros efectos colaterales como una caída en el flujo de remesas y en las exportaciones por la desaceleración de la economía estadounidense, nuevo epicentro de la pandemia.

Argumedo resume que la economía mundial vive un apagón y advierte que en el segundo trimestre se verá una disminución en el poder de compra en parte relacionado por la caída del flujo de remesas y la actividad en general. Solo en lo que va de la Cuarentena Domiciliar obligatoria (en vigor desde el 22 de marzo) el consumo de energía del país tuvo una baja de más del 70 %.

“El segundo y tercer trimestre será muy fuerte para todos los sectores por que el poder de compra de los consumidores se va a caer” y advierte que esto impactará a todas las actividades productivas, por lo que también sugieren activar el diálogo entre Gobierno y sectores productivos para el reinicio de actividades bajo nuevas medidas sanitarias.

El economista insistió en que la población debe estar consciente de los retos que se vienen. “Un mensaje muy importante para la sociedad salvadoreña es guarde los recursos. Si le dan $300 para la situación difícil de este mes, procure gastar racionalmente, gaste en lo más básico trate de estirar esos $300 para uno o tres meses porque la situación será complicada. No es que la economía se enciende y se apague como un switch de luz, este es un ciclo que nos va a golpear por varios meses, intensamente en dos trimestres y probablemente en el tercero y cuarto comenzamos a ver un mejor dinamismo de la actividad económica”.

 

BCR confirma los datos de 2019

El BCR confirmó ayer los datos de crecimiento de la economía en 2019. De acuerdo con los datos oficiales, la economía salvadoreña cerró el año con un crecimiento del 2.38 %, un ligero ajuste al alza contra las cifras preliminares presentadas en diciembre.

“Estos resultados evidencian una recuperación de la actividad económica en el primer semestre de gestión del actual gobierno, como resultado en general de un mejor clima de inversión y mejora de las expectativas de los inversionistas y los consumidores”, destaca el Banco.

El año pasado los motores de la economía fueron los sectores de la construcción, actividades financieras y de seguros. Hasta antes de la explosión de la crisis se había proyectado que el PIB salvadoreño tendría un crecimiento entre el 2.3 % y 2.7 %.