El alcalde Ernesto Muyshondt se dirige a las parejas durante la ceremonia en el parque Cuscatlán.


Desafiando la pandemia de coronavirus, 44 parejas celebraron su matrimonio este domingo en un acto a ritmo de marimba y presidido por el alcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt, quien abogó por la felicidad de todos en el día de San Valentín.

Bajo un toldo blanco y un telón del mismo color con flores de variados colores, desde muy temprano los novios se concentraron en el parque Cuscatlán o "parque de los enamorados", en el oeste capitalino, para celebrar su boda gratis.

El alcalde presidió la unión civil de las 44 parejas./AFP


"Hoy me siento alegre porque voy a estar unido legalmente", declaró Francisco Aparicio, de 75 años, uno de los contrayentes que llegó hasta el Cuscatlán para unirse a Emigdia Gómez, de 68 años.

Las parejas usaron mascarillas durante la celebración./AFP


Emigdia, con quien convive desde hace 15 años, es la tercera esposa de Francisco, luego de haber tenido dos parejas, una de ellas falleció cuando tenía 45 años. Con ninguna tuvo hijos.

Entre las parejas también figuraban Eduardo de La O, de 70 años, quien tras sufrir hace dos años un accidente cerebral llegó en silla de ruedas para unirse a su pareja Francisca Escoto, de 65 años.

Eduardo y Francisca tienen tres hijos y relataron al alcalde que han convivido juntos durante 49 años.

"Me casé para estar más unida con Eduardo hasta que Dios diga", declaró Francisca.

Una pareja se mira mutuamente durante la boda/AFP


Los más jóvenes fueron Moisés Noel Rosa y Sandra Abigail Ramírez, ambos de 18 años. Se conocieron cuando tenían 14 años.

"Estamos entregados el uno al otro y queremos tener dos hijos", declaró Moisés.
Esta unión entre ellos (parejas) le da vida legal a la familia que forman (...) y es importante por los derechos sucesorios". Ernesto Muyshondt, alcalde de San Salvador.

Agregó que realizar las bodas es la parte de su trabajo que "más le gusta". "Tengo súper buena mano: todos están felizmente casados".

Tras mencionar uno a uno los nombres de parejas para que a viva voz respondieran el deseo de contrar matrimonio, la boda finalizó sin incidentes.

Para sellar la jornada el edil pidió a las parejas el tradicional beso. Los participantes retiraron la mascarilla de sus rostros y se estrecharon en un abrazo y un beso, ante el aplauso de familiares y amigos presentes.

Las parejas solo se quitaron la mascarilla un momento para darse un beso tras darse el sí./AFP


Mientras cada pareja aguardaba su turno para tomar la foto oficial para su recuerdo, una marimba interpretaba diferentes melodías que hacían bailar a los más inquietos.

Por medidas de seguridad no se realizó el tradicional brindis, y a falta de pastel cada pareja recibió una porción de pan especial.

No faltaron los anillos de bodas./AFP