El Ministerio de Medio Ambiente deberá mantener en cautiverio a un búho adulto, el cual perdió la parte superior de su pico debido a las lesiones ocasionadas por las piedras que le lanzó una persona.

El ave tendrá que vivir en cautiverio debido a que no puede alimentarse por sí solo.


El búho fue encontrado herido en agosto del año pasado en una zona de Berlín, en Usulután, con graves golpes en el pico y en uno de sus ojos,. El diagnóstico apuntaba a eutanasia humanitaria, pero los veterinarios del centro de resguardo en Berlín no se rindieron y lograron sobrevivirlo.

El búho ahora está en el Centro Cuarentenario La Cañada del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), donde personal a diario se encarga de alimentarlo y darle de beber agua.

Estas especies de aves permanecen siempre en las partes altas de los árboles y se camuflan entre las hojas y la corteza, gracias a su plumaje. Presentan una coloración gris oscuro, combinado con marrón oscuro. Tienen áreas de blanco dispersas por todo el cuerpo y a lo largo de la parte frontal.

Este búho cornudo en realidad no tiene cuernos, sino que sus orejas son lo suficientemente grandes como para dar esa impresión.

En el país se conoce la presencia de 53 especies, 13 de ellas son nocturnas (búhos, tecolotes, lechuzas), mientras que 40 son diurnas (halcones, gavilanes, milanos). Habitan todos los ecosistemas del país. 17 especies son migratorias o transeúntes, mientras que las restantes 36 son residentes. El búho cornudo es una de ellas.

El MARN hace un llamado a la población para que se respete a los animales de la vida silvestre. La Ley de Conservación de la Vida Silvestre protege a todas las especies silvestres, sean exóticas o nativas. Además prohíbe matar, destruir, comercializar, importar, exportar y poseer especies de la vida silvestre en peligro o amenazadas de extinción, extraídas de su hábitat original, sin el permiso correspondiente. Estos actos son considerados como infracciones graves y son sancionadas con multas.