El presidente de la República, Nayib Bukele, aseguró que todo el Gobierno está desplegado en el territorio para atender la emergencia nacional por lluvias y prometió que no pararán hasta que se haya garantizado la seguridad de todas las familias salvadoreñas.



El mandatario dijo que no puedo negarse que El Salvador es un país “sumamente vulnerable”, pero también “nadie puede negar que todo el Gobierno se ha desplegado por todo el territorio nacional”. Dijo esperar que el clima mejor pronto.



 

Funcionarios de gobierno y titulares de carteras de Estado recorrieron distintos puntos en horas de la madrugada, entre ellos el ministro de Gobernación, Mario Durán, quien verificó las labores que se llevan a cabo para atender la emergencia en los lugares más afectados por las constantes lluvias que han afectado al país.



 

Durán señaló que el Gobierno trabaja “a lo largo y ancho del país” e hizo un llamado a la población a acatar las indicaciones ante la emergencia generada por las lluvias que, se espera, terminen pronto.

 


“Trabajaremos sin descanso hasta asegurarnos que nuestra gente tenga las mejores condiciones de resguardo”, indicó desde la residencial Santa Lucía, en Ilopango, donde en horas de la madrugada de este miércoles varias familias evacuaron sus viviendas en riesgo y fueron trasladadas hacia el albergue habilitado en la escuela John F. Kennedy de Ilopango.

 



 

El presidente de la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA), Frederick Benitez, también acompañó a Durán en el recorrido para verificar la situación de las personas damnificadas, que, según Protección Civil, ya suman 455. Benitez enfatizó que lo primordial en este momento es "garantizar condiciones dignas en los refugios" y se comprometió a seguir llegando a las zonas críticas.

 

 



Las lluvias han causado afectaciones en diversos puntos del territorio nacional, principalmente en la zona oriental y en el Bajo Lempa, donde aproximadamente 20 comunidades han sido golpeadas por las persistentes lluvias. En esa zona se han instalado dos albergues para refugiar a las familias afectadas, uno de ellos con capacidad para 1,600 personas y el otro para 875.