Langostas captadas en fincas del occidente del país. Foto: Cortesía
El presidente Nayib Bukele les pidió a los titulares de la Fuerza Armada, el Ministerio de Salud y al Ministerio de Agricultura controlar la posible paga de langostas que amenaza los cultivos de granos básicos de Centroamérica.
“Actuemos rápido y detengamos esto, antes de que afecte nuestras cosechas”, le ordenó Bukele al ministro Pablo Anliker, de Agricultura; Francisco Alabi, de Salud; y Merino Monroy, de Defensa.
Bukele se refiere a la advertencia emitida a inicios de julio por el Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA), quien alerta sobre el riesgo de la plaga tras las lluvias por la tormenta Amanda y Cristóbal.
En respuesta, el ministro de Agricultura aseguró que desde enero se mantiene vigilancia fitosanitaria “en las zonas donde se reproducen la plaga”. Se controló brotes en “enero, marzo y abril en San Vicente”, aseguró.
Señor Presidente @nayibbukele, desde enero implementamos vigilancias fitosanitarias en las zonas donde se reproduce la plaga, controlando brotes en enero, marzo y abril en San Vicente. Tras la alerta, hemos redoblado esfuerzos junto a @CENTAELSALVADOR y los ingenios azucareros.
— Pablo Salvador Anliker Infante (@Anlikerinfante) July 13, 2020
En tanto, el ministro Merino aseguró que “coordinaremos con el resto de las autoridades todo el apoyo de la Fuerza Armada para evitar que esa plaga afecte nuestras cosechas”.
A la orden Señor Presidente, coordinaremos con el resto de las autoridades todos los apoyos de la @FUERZARMADASV para evitar que esa plaga afecte nuestras cosechas.
— René Francis Merino Monroy (@merino_monroy) July 13, 2020
Según el OIRSA, la langosta centroamericana tiene capacidad de migrar más de 150 kilómetros y consume cada día entre 70 % y 100 % de su peso en material fresco, de esa forma una manga de esta plaga -con una densidad de 80 millones de individuos- puede consumir hasta 100 toneladas de alimento por día.
La langosta centroamericana representa una amenaza para 400 especies de plantas que sirven de alimento para las personas, con mayor riesgo para cultivos de maíz, frijol, sorgo, soya, cacahuate, caña de azúcar, así como tomate, chile, cítricos, plátano, coco, mango y pastizales.
Centroamérica ha sufrido varios brotes de esta plaga, el último registro en El Salvador data de 2018 cuando el país se enfrentó al período de sequía de hasta 40 días. La Cámara Salvadoreña de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo) asegura que se mantiene vigilante y, por el momento, no reporta mangas masivas.
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