El presidente de la República, Nayib Bukele, defendió sus sus proyectos en una cadena nacional que transmitió su mensaje ofrecido durante la inauguración de la construcción del nuevo puente binacional “General Manuel José Arce”, en La Hachadura.

“No basta con solo traer inversiones, con seguridad jurídica, no basta con que se establezcan nuevas empresas como ustedes han visto en esta semana que ha ocurrido, no basta con que tengamos nuevos ecosistemas digitales como el parque industrial tecnológico que inauguramos o que generemos energía con la planta energética que inauguramos o que tengamos nuevos proyectos como Bitcoin City , sino que también necesitamos lo básico, por ejemplo un puente”, dijo.

Aseguró que todos los gobiernos anteriores tenían en el abandono “prácticamente toda la infraestructura del país, todo estaba destruido, todo estaba mal”.

Bukele dijo que, cuando siempre ven que todo está mal, la oposición siempre pregunta cuándo arreglarán “otra cosa”.

Hizo un recuento de proyectos construcción de puentes, paso a desnivel, la construcción del viaducto Francisco Morazán. “Solo en Chalatenango se están haciendo tres carreteras gigantescas”, dijo.

“Es que dicen ¿y por qué no priorizan? Estamos priorizando todo”, aseguró.

Bukele rechazó que la delincuencia suba. Expresó que la oposición y “medios de la oposición” destacan cada caso de violencia. Aseguró que en su Gobierno hubo “transparencia en los fondos covid”, citando al Fondo Monetario Internacional (FMI).

También, el presidente respondió a sus críticos de su proyecto del hospital veterinario. “Para humanos hemos construido el Hospital El Salvador”, en Cifco, indicó.

El gobernante mencionó que El Salvador crecerá 10 % el próximo año y que esperan que sea un crecimiento sostenido. “Lo cual nos va a recuperar totalmente de las pérdidas de la pandemia”, dijo.

Agregó que entiende si una persona dice que no siente ese crecimiento económico porque no encuentra empleo; “para que se sienta, ese crecimiento debe ser varios años y debe ser sostenido”.

“Países como Singapur, que eran aldeas de pescadores, se convirtieron en uno de los países del primer mundo pero no lo hicieron en un año, en dos, en tres, sino en mucho tiempo”, fueron sus palabras.