El presidente Nayib Armando Bukele Ortez será juramentado el sábado y se convertirá en el octavo presidente de la República que sucede a otro democráticamente electo de manera consecutiva. También será el mandatario más joven de todos sus antecesores y por lo menos del último siglo.
He aquí un poco de historia sobre la sucesión democrática salvadoreña.
En 1982, una Asamblea Constituyente eligió como presidente provisional al abogado y economista, Álvaro Álfredo Magaña Borja, quien marcó así el inicio de la transición democrática salvadoreña. La Asamblea Constituyente había sido electa el 28 de marzo de ese año para instaurar la democracia después de una sucesión de cuestionados gobiernos militares y el golpe de Estado del 15 de octubre de 1979, que dio paso a una Junta de Gobierno cívico-militar.
La Constitución entró en vigencia el 20 de diciembre de 1983 y a Magaña Borja le tocó preparar las elecciones presidenciales de 1984 que ganó el ingeniero José Napoleón Duarte Fuentes, del Partido Demócrata Cristiano, a quien lo correspondió dirigir los destinos del país en los años más cruentos del conflicto armado. Duarte fue pues, el primer presidente electo democráticamente y el primero que le entregó la banda presidencial a otro civil democráticamente electo.
Su sucesor fue Alfredo Félix Cristiani Burkard, del partido ARENA, un empresario al que le tocó negociar los Acuerdos de Paz con la guerrilla del FMLN y que fueron suscritos el 16 de enero de 1992 en la Ciudad de México.
A Cristiani lo sucedió cinco años más tarde, el exalcalde de San Salvador y abogado Armando Calderón Sol, también del partido ARENA, a quien le correspondió la aplicación de los Acuerdos de Paz y lanzó una ambiciosa reforma educativa.
El cuarto presidente electo democráticamente, de manera consecutiva, fue Francisco Guillermo Flores Pérez, también del partido ARENA, quien asumió el poder el 1 de junio de 1999. A Flores le correspondió enfrentar los terremotos del 2001, implementó la dolarización e impulsó los tratados comerciales. Flores fallecería en 2016 en medio de un proceso en su contra por el desvío de fondos taiwaneses.
El empresario radial Elías Antonio Saca González -también de ARENA- se convirtió el 1 de junio de 2004 en el quinto presidente electo democráticamente, quien mantuvo una política de alineamiento con Estados Unidos y envió tropas a Irak. Su gobierno enfrentó la crisis económica mundial y anunció una política de "Súper mano dura" contra las pandillas, de resultados mediocres.
A Saca lo sucedió el periodista Carlos Mauricio Funes Cartagena, quien era el candidato del FMLN, la antigua guerrilla, convirtiéndose en el primer mandatario de izquierda en la historia del país. Funes asumió el cargo el 1 de junio de 2009 con promesas de una "revolución ética" y "meritocracia", pero su gobierno se convirtió en un foco permanente de conflictos cuando intentó controlar a la Sala de lo Constitucional y estableció una tregua con las pandillas, por las que fue duramente criticado.
Tanto Saca como Funes terminaron enfrentando sonados casos de corrupción, que llevaron a la condena penal de Saca y a Funes a exiliarse en Nicaragua.
A Funes lo sustituyó su vicepresidente, Salvador Sánchez Cerén, también del FMLN, convirtiéndose en el séptimo mandatario de la era democrática. Su gobierno ha sido bastante criticado por su falta de liderazgo y su ausencia en momentos claves de su mandato.
A Sánchez Cerén lo sustituirá este sábado el joven empresario Nayib Bukele, exalcalde de Nuevo Cuscatlán y San Salvador, que se ha declarado victorioso tras derrotar a los partidos históricos del conflicto armado.