AFP


El este de Canadá, especialmente la provincia de Quebec, está en alerta máxima este sábado y el ejército fue llamado como refuerzo, a la espera de inundaciones catastróficas en los próximos días luego de que varios ríos comenzaron a desbordarse.

Las inundaciones primaverales se cobraron una primera víctima el sábado en el municipio de Pontiac (en Quebec, al oeste de Ottawa), donde una septuagenaria cayó de noche con su vehículo a una corriente de agua, anunció la alcaldía local.

Las abundantes lluvias de los últimos días, sumadas al derretimiento de la nieve en el conjunto de la red hidrográfica, incrementaron los caudales de decenas de ríos del oeste de Ontario, de Quebec y de Nuevo Brunswick, más al este.

Las autoridades esperan el pico de inundaciones para el domingo en la región de Montreal, y lunes y martes más al este. El grueso de las precipitaciones ocurrió la tarde del sábado pero el alza neta de la temperatura esperada a partir del domingo en Quebec debería acelerar el derretimiento de la nieve, según los servicios meteorológicos.



Varios municipios declararon el estado de urgencia, especialmente en la región de Outaouais cerca de la capital Ottawa, en algunas zonas de Montreal, en Trois-Rivières, en la región de Quebec y en Nuevo Brunswick. En varios municipios se han distribuido sacos de arena para construir diques o proteger inmuebles.

El ejército fue llamado el viernes para hacer labores de respaldo, a pedido de la ministra de Seguridad Pública de Quebec, Geneviève Guilbault, que ha llamado a la población a la "extrema prudencia y extrema vigilancia".

Varios equipos de reconocimiento del ejército fueron desplegados el sábado en las regiones más afectadas para evaluar las necesidades de los próximos días, dijo Guilbault.

El este de Canadá registró en la primavera boreal de 2017 sus peores inundaciones en medio siglo, con daños importantes y la evacuación de miles de personas de Ontario a Nuevo Brunswick.