Escuchar a los candidatos hablar sobre las soluciones a los principales problemas del país es indispensable, pues estamos viviendo tiempos sumamente difíciles y complejos. Invito a los candidatos a la presidencia a que se conviertan en promotores de cultura de paz, como una contribución a la unidad y solidaridad que tanto necesita El Salvador, ante las grandes dificultades que tenemos.
Hoy es el momento para que los candidatos den a conocer cuál es su propuesta para conseguir la paz social. No hay donde perderse: el principal problema del país es la delincuencia, la violencia la inseguridad, las pandillas.
La inseguridad ciudadana provoca un enorme costo social e impide el desarrollo del país. Urge trabajar porque cambien los hábitos y actitudes de los salvadoreños y se pase de una cultura de la confrontación y la violencia a una cultura de paz y reconciliación. Señores candidatos, en sus manos está la oportunidad de sacar adelante al país. No la pierdan.
Está claro que es mínimo el avance en el tema seguridad que tiene el país: después de casi cinco años de gobierno, 87 personas fallecieron por causa de la delincuencia en los últimos meses. Hoy, el consuelo es que en ese mismo periodo del año anterior, el número de muertos fue de 96 y que ahora sean nueve homicidios menos, no da razones para estar tranquilos.
Si al terminar los conversatorios en la UCA no hay nuevas ideas sobre las políticas de Estado que necesita el país para avanzar significativamente en la disminución de la violencia y la delincuencia el esfuerzo no valió la pena.
La Cultura de Paz se construye en la familia y la escuela que son los agentes primarios de socialización, conocer qué medidas proponen los candidatos para la formación adecuada de la niñez y la juventud es fundamental. El futuro Gobierno debe destinar los fondos necesarios para desarrollar programas de Cultura de Paz.
Los planes de gobierno que den a conocer los candidatos en los conversatorios de la UCA deben tener como uno de sus objetivos promover un incremento del conocimiento público y la enseñanza de la cultura de paz y reconciliación a nivel nacional.
Una oferta electoral no estará completa si no tiene medidas que garanticen que en todos los niveles del sistema educativo se imparta una cátedra de Cultura de Paz, que posea contenidos especializados en solución alterna de conflictos. Se trata que podamos escuchar de los candidatos cuál es el proyecto de transformación curricular que proponen para desarrollar programas y asignaturas de Cultura de Paz y Educación para la ciudadanía.
Señores candidatos: las visitas casa por casa, las redes sociales, los spots en la televisión y lo que digan los familiares y amigos, influye en la intención de voto. Pero son las propuestas que están en los programas de gobierno y los hechos políticos que ustedes generen lo determinante.
Además, es necesario que los asesores de campaña les digan a los candidatos que deben dar a conocer a los miembros del equipo de gobierno que los van acompañar si ganan la elección. Esto es clave. Se trata de personas especialistas en su área que den confianza en que los asuntos de Estado, van a quedar en buenas manos.
Según las encuestas, a estas alturas del partido, la mayoría de las personas que irán a votar ya tomó su decisión, falta más de un 20 % de electores que están indecisos y para estas personas las soluciones que propongan los candidatos para resolver los problemas de seguridad y de empleo son importantes; les preocupa el alto costo de la vida y también la corrupción.
Señores candidatos: los asistentes a los conversatorios y debates que se organizarán en los próximos días esperan ver personas que demuestren liderazgo, capacidad para gobernar, identificación con los intereses de la ciudadanía. Políticos en los que se puedan confiar las riendas del país. Por favor no nos decepcionen.