La semana pasada, Luna se reunió con jueces y magistrados para pedir los beneficios. / DEM


La Dirección General de Centros Penales (DGCP) informó ayer a los 15 jueces de vigilancia penitenciaria que la propuesta de liberar a reos en condiciones de vulnerabilidad, debido al encierro y hacinamiento, queda sin efecto.

En un oficio que envió ayer el director de la DGCP, Osiris Luna, dice que “ha tomado la decisión de no continuar impulsando el esfuerzo sugerido por el Comité Internacional de la Cruz Roja, orientado hacia la adopción de medidas preventivas en los diferentes centros penitenciarios para las personas privadas de libertad en condición de vulnerabilidad que representan alto riesgo de mortalidad por contagio del COVID-19”.

Esta propuesta había sido presentada por Luna, el pasado 25 de marzo en una reunión que sostuvo con magistrados de la Corte Suprema de Justicia y los jueces de vigilancia penitenciaria.

El titular de Centros Penales dice que da marcha atrás a la propuesta debido al mal manejo que se ha hecho por parte de diferentes sectores y actores claves, lo cual daña la imagen y prestigio de la institución que preside y la buena fe con la que se está actuando.

Según Osiris Luna,a los magistrados y juces nunca se les entregó un listado y número de reos que de manera obligatoria podían beneficiarse con libertad condicional anticipada, suspensión condicional de la ejecución de la pena o la instalación de brazalete electrónico.

El funcionario menciona en el oficio que la idea de enviar a este sector de la población penitenciaria era con el fin de disminuir el riesgo de contagio, sobre todo porque son personas mayores de 60 años con enfermedades crónicas y terminales.

Estos internos de acuerdo a lo que señala en el escrito, son los que a diario salen de las cárceles a recibir atención médica, y eso los expone junto al personal penitenciario a contraer el virus y llegar a contagiar al resto de internos, sobre todo por los niveles de hacinamiento que se tienen.