China Airlines se vio sacudida por un escándalo de tráfico ilegal, tras la revelación de que los escoltas de la presidenta de Taiwán vendían miles de paquetes de cigarrillos libres de impuestos durante los viajes de la mandataria al extranjero.

El contrabando, que salió a la luz esta semana, parece que se llevó a cabo durante años, tanto bajo la presidencia de Tsai Ing-wen como la de su predecesor, Ma Ying-jeou.

El director de los servicios de inteligencia taiwaneses dimitió esta semana después de que se supiera que un agente que acompañaba a la presidenta en una visita de Estado al extranjero fue visto el lunes intentando introducir ilegalmente casi 10.000 cartones de cigarrillos.

El escándalo afloró medio año antes de las elecciones presidenciales de enero en Taiwán, a las que Tsai tiene previsto presentarse.

"El comportamiento inconveniente de los agentes de la oficina nacional de Seguridad, con la compra masiva de cigarrillos libres de impuestos, revela malas prácticas desde hace tiempo", publicó Tsai en Facebook el jueves.

"Creo que es inaceptable y ordené a todas las unidades que cooperen en la investigación judicial", añadió.

El caso salpicó a la compañía aérea China Airlines, que suele ocuparse de los vuelos para los viajes presidenciales, y que está controlada mayoritariamente por el Gobierno.

El presidente de China Airlines, Hsieh Shih-chien, se disculpó y aseguró que la compañía dejaría de ofrecer el servicio de pedidos por adelantado de productos libres de impuestos en los viajes presidenciales.

Hasta la fecha, dos agentes fueron detenidos por su presunta participación en este tráfico, y el gobierno pidió una investigación interna de China Airlines.