Uno de los problemas dentales más comunes al regresar de vacaciones son las caries que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es el trastorno más prevalente de entre las enfermedades bucodentales.

Por ello, la prevención es la clave para mantener unos dientes sanos. Evitar las golosinas, la bollería industrial o las bebidas azucaradas, así como cepillarse los dientes después de cada comida y utilizar seda dental, ayudará a reducir las posibilidades de padecer este tipo de problemas, tal y como han indicado desde Sanitas Dental.

Además, existen alimentos que ayudan a combatir el riesgo de sufrir caries y otras complicaciones o dolencias bucales derivadas de una higiene dental deficiente. Los expertos de Sanitas Dental han elaborado un listado de alimentos que se deben incluir en la dieta diaria para minimizar el riesgo de padecerlas.

1. Yogures y lácteos. El calcio, presente en alimentos como los lácteos, es un componente esencial para evitar la aparición de la calles. Por ello, productos como la leche o los yogures son una importante fuente de este mineral, que ayudará a conseguir una dentadura fuerte y sana. Además, lácteos como el queso tienen la capacidad de neutralizar la formación de ácidos que deterioran el esmalte. Otros alimentos, como los cereales, las verduras u hortalizas de color verde oscuro también contienen un alto contenido en calcio.

2. Apio y zanahorias. Consumir zanahorias crudas ayuda a fortalecer los dientes y las encías, ya que masticarlas evita que las bacterias se adhieran a los dientes, además de mejorar el riego sanguíneo. Esta hortaliza activa también las glándulas salivales, claves para eliminar las bacterias de la cavidad oral, y contiene flúor, un mineral fundamental para mantener el esmalte y evitar la aparición de caries.

De la misma forma, el apio también favorece la producción de saliva gracias al ácido málico, que ayuda a limpiar la dentadura e impide la aparición de manchas en los dientes.

3. Pescado azul. La acumulación de bacterias, presentes en los restos de comida, es la principal causa de problemas periodontales como la gingivitis. La vitamina D facilita la absorción del calcio y el fósforo, haciendo las encías y dientes mucho más resistentes a este tipo de infecciones. Esta vitamina está presente en alimentos como el atún, las sardinas o el salmón.

4. Huevos y legumbres. Al igual que el calcio, el fósforo es otro elemento esencial para el correcto mantenimiento de la estructura de los dientes. Los huevos son un alimento con un alto contenido de este mineral presente en dientes y huesos, que también puede encontrarse en legumbres como los garbanzos o las lentejas.

5. Manzanas y kiwi. Morder una manzana contribuye a la limpieza bucal eliminando las bacterias que favorecen el desarrollo de caries y gingivitis, ya que, al masticarla, se produce en la dentadura un efecto que puede asemejarse al del cepillado y se favorece la eliminación de la placa. Otras frutas, especialmente las que contienen vitamina C como el kiwi, pueden ay