Compañías de cruceros han prometido fondos para ayudar en las operaciones de emergencia en las Bahamas, uno de sus destinos más visitados, tras la devastación provocada por el huracán Dorian.

La empresa Royal Caribbean, que lleva cada año a miles de turistas al archipiélago desde hace más de medio siglo, anunció que iba a "remangarse para ayudar a sus amigos" y prometió donar un millón de dólares para las labores de reconstrucción.

Disney Cruise Line indicó, por su parte, a través de su matriz Walt Disney, que iba a dar "más de un millón de dólares" para ayudar a las Bahamas.

El huracán, que se desplazaba este miércoles en paralelo de las costas de Florida, dejó al menos siete muertos en el archipiélago, un balance que podría empeorar, teniendo en cuenta la magnitud de los destrozos provocados.

"Para estar seguros de que las donaciones irán allá donde sean más útiles, colaboramos con el gobierno bahameño y nuestro socio con fines no lucrativos, la Fundación para el Desarrollo Panamericano (PADF)", así como con otras organizaciones caritativas, precisó Royal Caribbean en un comunicado.

- Generadores eléctricos -

La compañía animó a sus viajeros y a sus empleados a donar dinero a esos fondos de rescate, indicando que aportaría exactamente la misma cantidad que ellos. Royal Caribbean también cargó sus barcos con material necesario como generadores, agua y ropa de cama para llevar a las Bahamas.

Su socio mexicano ITM, con el que forma la empresa conjunta Holistica Destinations para crear un complejo turístico en Freeport, en la isla de Gran Bahama, anunció por su parte una donación de 100.000 dólares.

Walt Disney manifestó en tanto "su solidaridad con el pueblo de las Bahamas afectado por el huracán Dorian".

"Esperamos que nuestra donación de un millón de dólares aporte ayuda, si es necesaria, y asista a nuestros vecinos, colegas y todos quienes se vieron afectados por esa tormenta a emprender el largo camino hacia la reconstrucción", escribió Robert Iger, el director ejecutivo de Disney.

Las 700 islas del archipiélago de las Bahamas se extienden por el océano Atlántico y son un puerto de destino para muchos barcos de crucero por su cercanía con Estados Unidos. Algunas de ellas se sitúan a solo 80 km de las costas de Florida.

Pero desde hace tres días, las compañías evitaron la región, desviando sus barcos o prolongando su estancia en el mar para permanecer lejos del ojo del huracán.

Carnival Cruise Line decidió anular varios viajes y reembolsó a sus clientes.

"Hemos mantenido un contacto estrecho con los responsables gubernamentales durante el fin de semana y estamos dispuestos a suministrar asistencia humanitaria y económica", dijo Christine Duffy, presidenta de esa compañía a la AFP.