El exministro de Obras Públicas, Jorge Nieto, fue condenado a 12 años de prisión por el delito de peculado, caso conocido como Diego de Holguín II; además, deberá pagar en concepto de responsabilidad civil $12,984,953.52.
En el fallo emitido ayer por el Tribunal Quinto de Sentencia de San Salvador, también fueron condenados a tres años por el delito de peculado por culpa, Iván Cañas, el ingeniero civil que fue designado administrador del proyecto por parte del MOP; Carlos Arturo Ruiz Ayala y Alberto Orlando Colorado Cordero, quienes tenían los cargos de director de Inversión Vial y gerente de Vías Urbanas e Interurbanas de dicha cartera de Estado.
A los tres imputados la Fiscalía los acusó por complicidad necesaria en el delito de peculado doloso, pero el tribunal cambió la calificación a peculado por culpa y les impuso los tres años; no obstante, los jueces les suspendieron la ejecución de la pena y les impusieron reglas de conducta, consistentes en llegar a firmar una vez al mes a un juzgado de vigilancia penitenciaria.
En este proceso también fue enjuiciado el exviceministro de Obras Públicas, Sigifredo Ochoa Gómez, por los delitos de peculado y falsedad documental agravada, pero el tribunal no encontró ninguna prueba en su contra y lo absolvió.
Fundamento
De una forma unánime los jueces dijeron que Jorge Nieto, permitió que un tercero se apropiara de fondos del Estado, refiriéndose al guatemalteco prófugo Jesús Hernández Campollo, representante legal de la empresa Copreca, quien para la ejecución de la obra hizo un asocio con la Constructora Linares.
El juez Ulises García, destacó que “las estimaciones de la obra fueron un medio para que un tercero se apropiara de fondos del Estado y laudo arbitral, también fue medio para que un tercero se apropiara de fondos del Estado”.
Ese fundamento judicial se basa en que durante la ejecución de la obra el asocio Copreca Linares disfrazó la sustracción de fondos del Estado con estimaciones de proyecto y laudos arbitrales, al grado que se les pagó por obras no ejecutadas un monto de $9,366,038.
Se estableció que el MOP a través de sus titulares David Gutiérrez (2005-2006) y Jorge Nieto (2007-2009), pagaron a Copreca Linares $23,435,120 equivalente al 91.35 de ejecución de la obra, cuando en realidad tuvieron que haber cancelado $14 millones, lo cual indica que hubo un exceso de pago por $9,366,038 y que corresponde a dinero que jamás debió erogarse por parte del Estado.
Para los jueces, el proyecto Diego de Holguín II, ha dejado al descubierto una serie de actos de corrupción detectados mediante actas de seguimiento, así como informes mensuales de ejecución de la obra adjudicada como un contrato de llave en mano que prohíbe las órdenes de cambio y ajustes de precio; sin embargo, en esta obra se obviaron esas normas y de forma dolosa se le permitió al contratante sustraer dinero que fue utilizado para abrir cuentas bancarias con el fin de ganar intereses, pagar deudas y para invertir en filiales en otros países.
Los fiscales del caso dijeron que la sentencia condenatoria la esperaban, porque la abundante prueba incorporada en el juicio que duró tres meses era contundente, no así el abogado Luis Edgar Morales Joya, quien argumentó que lo le parecen muy correctos los argumentos del tribunal para emitir la condena y adelantó que van a apelar esa decisión.