El Tribunal Tercero de Sentencia de San Salvador impuso ayer la condena a los tres ciudadanos originarios de Colombia. / Juan Carlos Villafranco.
Luego de admitir que transportaban en un semisumergible 1,313 kilogramos de cocaína, valorada en $32,825,000, tres colombianos fueron condenados ayer a 13 años de prisión por el delito de tráfico ilícito internacional.
Los extranjeros Edgar Aguirre Mayorga, de 49 años de edad; Silano Riasco de 35 y Silvio Montaño Sánchez, de 50, confesaron ante la jueza de la causa que desde las costas de Colombia partieron con destino a Guatemala, en la embarcación que, según la terminología naval, es calificada de bajo perfil o semisumergible.
Sin proporcionar detalles respecto a qué cartel o persona pertenecía la droga y a quién la entregarían en Guatemala, los colombianos se limitaron a decir que ellos transportaban la droga.
Los fiscales, y hasta la jueza, intentaron obtener información más amplia sobre la droga, pero los colombianos esquivaron las preguntas. Los fiscales al interrogarlos les pidieron que dijeran quién iba a recibir el cargamento de la cocaína, pero ellos respondieron: “no sabemos”.
La jueza también les consultó hacia dónde se dirigían con la droga, cuál era la ruta que llevaban, y quién los recibiría, pero dijeron que ellos no tenían un lugar específico y que en algún lugar les iban a mostrar una luz para que ahí dejaran el cargamento, y que ellos en alta mar se guiaban al compás del agua.
Por medio de su defensor, los extranjeros negociaron con la Fiscalía una pena de 13 años, ya que en un juicio ordinario podían ser condenados hasta con 20 años de prisión.
El procedimiento abreviado es señalado en el artículo 417 del Código Procesal Penal y como principal requisito, un imputado debe confesar los hechos para optar a esta salida.
“La suscrita jueza, al haber escuchado su confesión y manifestaran que estaban conscientes que traían droga, debe condenarlos a 13 años de prisión como lo han acordado con la Fiscalía”, dijo la jueza a los colombianos.
El decomiso
Según se conoció en el juicio, el 10 de diciembre del año pasado los colombianos fueron ubicados por un patrullero marítimo de la Fuerza Naval al sur de Punta Remedios, a unas 225 millas náuticas del suroeste del puerto de Acajutla, Sonsonate.
“Iban en una embarcación de bajo perfil con 63 bultos resguardados en el semisumergible, forrados con sacos de nylon, eran 1,313 kilogramos de cocaína y llevaban logos variados los paquetes”, sostuvo uno de los fiscales del caso.
La Fiscalía General de la República incorporó álbumes fotográficos y la prueba de campo, que expertos antinarcóticos hicieron frente a los extranjeros a los 63 bultos para verificar que se trataba de cocaína.
El año pasado este fue el segundo más grande decomiso de cocaína llevado a cabo por autoridades salvadoreñas, ya que el primero fue la incautación de 7 mil kilos transportados en otro semisumergible, el 6 de noviembre, ese cargamento fue valorado en $175 millones.
Segunda mayor incautación de 2018
10/12/2018
Una embarcación de la Fuerza Naval interceptó el semisumergible con bandera colombiana a 225 millas náuticas del suroeste del puerto de Acajutla.
