Organizaciones defensoras de derechos humanos criticaron ayer los convenios migratorios firmados por el Gobierno del presidente de la República, Nayib Bukele con funcionarios de Estados Unidos y señalaron que es una militarización en las fronteras que violentará los derechos de los migrantes.


Durante el foro denominado “Estrategias para el abordaje de la Migración en Centroamérica y México bajo principios de derechos humanos y del cumplimiento del Plan acción Brasil”, la directora de regional de programas de Cristosal, Celia Medrano, afirmó que los convenios en el área de seguridad en pasos fronterizos buscan a través de acciones militares “contener flujos migratorios”.

“Estamos viviendo una situación de retroceso con respecto a derechos humanos y la necesidad de migración (…) es importante retomar que hay responsabilidades que los Estados asumieron que no se están cumpliendo”, aseveró Medrano.

Asimismo, la directora del Servicio Jesuita para migrantes de Nicaragua, Lea Montes indicó que los Gobiernos deben enviar a las zonas limítrofes a defensores de derechos humanos para que brinden asesorías a los migrantes y personal de salud para atender los problemas psicosociales de quienes abandonan sus países de origen.

El pasado 12 de septiembre, el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública reforzó con 800 policías y 300 oficiales de migración los pasos fronterizos para combatir la trata, el tráfico ilegal de personas y el contrabando.

Esto para cumplir con el carta compromiso para reducir la migración y las pandillas, que el Gobierno salvadoreño firmó con los Estados Unidos, a través de Kevin McAleenan, secretario interino de seguridad nacional.