A menos de una semana para que la actividad económica comience a retomar ritmo, la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador (Camarasal) advierte que sin los fondos de ayuda muchas empresas podrían caer en quiebra técnica.

De acuerdo con un estudio de la gremial, la crisis económica asociada por la pandemia del covid-19 ya golpeó y obligó al cierre a un 17 % de las micro, pequeñas y mediana empresas (mipymes), mientras que un 37 % podría ser arrastrada sin los acompañamientos ofrecidos por el Ejecutivo.

Federico Hernández, director ejecutivo de la Cámara, explicó que las encuestas elaboradas por la gremial indican que un 37 % de las empresas, es decir, entre tres y cuatro de cada 10, han estado cerradas y podrían volver a abrir, pero sus esfuerzos podrían agotarse si no tienen acceso a liquidez

“Consideramos que (la crisis) ha sido un golpe muy fuerte, como nunca antes. Se ha hablado de niveles de contracción económica como los de 2008 – 2009, creemos que podría ser peor. La situación nos demanda a todos buscar la manera de superar esto”, dijo ayer en Diálogo, de Canal 21.

La Cámara, junto con la Asociación Nacional de la Empresa Privada (ANEP), apoyaron la idea de crear un fideicomiso para impulsar la etapa de recuperación, sin embargo, este no avanza a la velocidad deseada.

La semana pasada, el presidente del Banco de Desarrollo de El Salvador (Bandesal), Juan Pablo Durán, dijo que estaban gestionando unos $110 millones de un fondo de $600 millones.

“Desde que comenzó la emergencia propusimos medidas de alivio económico, principalmente para las pequeñas y medianas empresas lograran sobrevivir a esta crisis, Junto con la ANEP (impulsamos) la creación de un fideicomiso, esa era una de nuestras propuestas”, dijo Hernández que reconoció que el sector comercio está con una expectativa muy alta sobre su recuperación, y que cientos de familias dependen de que esta recuperación sea efectiva.

 

Autorregulación

Sin una ley que regule la reactivación de la economía, uno de los temores en el ambiente es que la actividad, detenida desde mediados de marzo, se convierta en un foco de contagio.

Jorge Hasbún, presidente de la Cámara, insistió en que el rubro privado formal ha trabajado en adoptar los protocolos y que consideran que no habrá grandes riesgos, pero hizo un llamado a la prudencia. “La gran mayoría del sector está listo, tiene protocolos implementados.

El sector formal ya está listo para abrir de forma gradual”, insistió.

“Nos encontramos con que el 24 (de agosto) va a haber una apertura y lo que nosotros estamos haciendo es un llamado a la gradualidad, entendemos que los socios ya no aguantan, muchos de ellos ya claudicaron, ya están sin recurso alguno para poder operar y están desesperados por abrir, pero no le trae bien a nadie abrir de golpe; estamos llamando a la gradualidad por sector y una autorregulación”, dijo el presidente de la gremial.

 

Turismo a la expectativa

La ministra de Turismo, Morena Valdez, dijo ayer que las empresas del rubro tendrán que apegarse a los protocolos y que en lo posible deberían reiniciar operaciones de acuerdo con el calendario de fases que había propuesto el Ejecutivo.

El calendario estipulaba que el sector regresaba en la fase cuatro, es decir el 19 de septiembre. El turismo es uno de los rubros más golpeados por la inactividad, pero el Ministerio ha colaborado en la elaboración de ocho protocolos de bioseguridad para disminuir el riesgo de contagio.

 

Turismo después de pandemia

Esta semana, diversos negocios relacionados con el sector han comenzado a promocionar sus servicios en redes sociales, uno de ellos, el hotel Estero y Mar recalcó que no iniciará operaciones el 24 de agosto, pero que sí lo hará más adelante, sin embargo, suspenderá -por lo que resta del año- las visitas del día y brindará solo servicios con reservas de habitación.

En tanto, el ecoparque Santa Cruz La Vega confirmó en sus redes sociales que reabrirá el 28 de agosto con actividades al aire libre, uno de los rubros que entidades como la Agencia de Turismo de Centroamérica (CATA, por sus siglas en inglés) prevé serán parte de las actividades que cobrarán relevancia en la etapa postcovid.