La Fundación Poma apoyó con donaciones durante los meses de mayor confinamiento por el covid-19.


El Salvador logró avances sociales en las últimas tres décadas, desde el fin de la guerra civil, que hoy se encuentran en riesgo por el impacto de la pandemia. El covid-19, un virus que ni siquiera es visible al ojo humano, dejaría graves estragos en el progreso de la población.

La pandemia amenaza con fuertes retrocesos en salud, educación y garantía de derechos individuales, como libertad de expresión, concluye un informe elaborado por el Centro de Progreso Social en coordinación con la Fundación Poma y la Escuela Superior de Economía y Negocios (ESEN).

El estudio pretende dar “una mirada de cómo está El Salvador” en el Índice de Progreso Social (IPC), una herramienta que mide el bienestar de la población en áreas esenciales como acceso a servicios básicos, educación, vivienda y libertades.

 

Una mirada al IPS.

Manuel Sánchez Masferrer, coordinador del Centro de Progreso Social de la Fundación Poma, enfatizó que El Salvador ya se había quedado atrás que los demás países evaluados con el IPS en la región latinoamericana por lentos avances en falta de seguridad personal y baja en la tasa de matrícula escolar -primaria y secundaria-.

El Salvador se encuentra en la posición 14 de 17 naciones latinoamericanas, solo por encima de Nicaragua, Honduras y Guatemala. En el IPS global, en tanto, se ubica en el puesto 94 de 163 países.

El documento, titulado “Cerrar las brechas de progreso social: prioridades y propuestas para El Salvador”, es un esfuerzo que pretende brindar propuestas de política pública que se fundamenten en análisis técnicos, objetivo y ejecutable, destacó Alejandro Poma, vicepresidente de Fundación Poma.

La investigación centró su mirada en proponer respuestas en los pilares donde se observarían los mayores retrocesos por la pandemia para garantizar que las intervenciones logren resultados y se reduzca el impacto, sumó por su lado Masferrer.

 

Una mirada al IPS.

Ya en una primera evaluación del Centro, presentada en julio, se advertía que las áreas de mayor impacto por la pandemia serían salud y educación.

En salud por la caída de atenciones primarias y preventivas, mientras que en educación la falta de conectividad implica un riesgo de deserción escolar y reducción en la calidad del sistema.

Las vulneraciones a libertades individuales es un fenómeno observado a nivel global y potenciado por las medidas extraordinarias y se elevó la precariedad en los empleos.

 

¿Cuáles son las propuestas?

 

  1. Salud


Mantener una cobertura universal de las vacunas para que no surjan enfermedades. Expandir la cobertura de servicios preventivos y de atención primaria desde las clínicas porque tiene mayor impacto.

 

  1. Educación


Antes de invertir en computadoras, mejorar la infraestructura básica de los centros escolares. Reformar el sistema de formación inicial docente con estándares de calidad y promover la educación superior.

 

  1. Seguridad


La seguridad ciudadana mejora este 2020, pero la propuesta del estudio es promover la seguridad vial mediante reformas a la regulación y vigilancia -señalización, regulación de motos- para reducir la mortalidad.

 

  1. Internet


Ya que la pandemia impulsó el uso de Internet, se propone crear una infraestructura para reducir el costo del acceso y aumentar la cobertura. También hay una propuesta para mejorar la calidad medioambiental.

 

El dato

El Índice de Progreso Social es una herramienta creada y compilada por el Social Progress Imperative -cuyo socio local es la Fundación Poma con su Centro de Progreso Social.