Cuba se prepara para devaluar su moneda, como parte de una serie de medidas para contener el impacto de la crisis económica asociada con la pademia del nuevo coronavirus.

Marino Murillo Jorge, un alto funcionario del gobierno cubano, dijo este martes (13.10.20) que el panorama de la economía es desolador.

“No va a ser posible no devaluar el peso cubano”, dijo el funcionario, aunque no quiso adelantar la cifra en la que quedará el peso o la fecha de la devaluación, aunque mencionó que se ejecutará en el primer día de un mes sin especificar.

En Cuba circulan el peso cubano —en el que cobran sus salarios los trabajadores estatales— y el peso convertible, equivalente al dólar y que se cambia al Estado en 24 pesos moneda nacional. El peso convertible se ha devaluado en el mercado informal frente al dólar, la única moneda con la que el gobierno cobra en nuevas tiendas estatales.

“Esto en automático (la devaluación) no va a resolver los problemas de la economía cubana”, dijo Murillo, quien aseguró que el proceso será “irreversible y transversal” y confirmó que impactará a la población.

La medida traerá varias consecuencias, como un inevitable incremento de los precios.

“Si devaluamos el peso no va a haber más remedio que incrementar los precios mayoristas, a su vez incrementar los precios minoristas y a su vez incrementar los salarios. Ese es el diseño en sentido general”, dijo Murillo para ejemplificar el aumento de precios y salarios que está en marcha.

El fondo de salario en Cuba subirá 4.9 veces y las pensiones de la seguridad social cinco veces, dijo el funcionario, que reconoció una “inflación reprimida” que se manifiesta en largas filas y aumento de precios en el mercado informal.

“El incremento de los precios mayoristas estará influenciado por la devaluación monetaria y una reforma de salarios”, añadió el funcionario.

De acuerdo con El Nuevo Herald, Murillo (jefe de la Comisión de Implementación de los Lineamientos) es conocido entre los expertos en economía cubana como “el zar de las reformas”, designado por el gobernante Raúl Castro para encabezar los cambios económicos del régimen.

Un solo "peso"


El plan del castrismo es unificar al peso cubano y al peso convertible. “La unificación monetaria se hace un día cuando digamos: ya no existe el peso convertible, no circula más legalmente. Eso es una decisión. A partir de ese momento tienes una sola moneda circulando en la economía”, dijo Murillo, quien intentó tranquilizar en un programa de televisión que darán al menos cuatro meses para cambiar los pesos convertibles en la tasa actual.

Para las empresas el tipo de cambio es un peso convertible por un peso cubano, a diferencia de las personas naturales, para quienes un peso convertible equivale a 24 pesos cubanos.

En audios que circularon en las redes sociales cubanas en septiembre, funcionarios que participaron en la elaboración del plan de unificación monetaria detallaron importantes incrementos de precios para los productos de primera necesidad y también una subida de salarios y pensiones.

“Van a aumentar los salarios de los trabajadores (...) la canasta básica va a tener un valor estimado de 1,528 pesos porque se van a eliminar los subsidios”, explica una funcionaria en un audio al que tuvo acceso el Nuevo Herald.

Murillo dijo que iban a descentralizar los precios mayoristas al menos durante el primer año tras unificar las monedas para evitar la inflación.

El funcionario explicó que el presupuesto del Estado no puede seguir subsidiando pérdidas de empresas cubanas, a las que caracterizó como “ineficientes”.

Murillo dijo que el gobierno tiene previsto subsidiar durante el primer año a un grupo de empresas ineficientes para evitar un incremento sustancial del desempleo. No especificó el número de empleos que pudieran estar en riesgo al terminar el año de prueba.