Tres laboratorios de drogas sintéticas cuya producción se estima en 160 millones de dólares fueron desmantelados este martes en Sinaloa, un estado del noroeste de México cuna de grandes capos, informó la policía local.

Los laboratorios de metanfetaminas se encontraban en El Dorado, al sur de la capital estatal, Culiacán, cerca de un canal de agua que desemboca en el mar y en cuyo cauce se derramaban los químicos precursores que se necesitan para esos estupefacientes.

Según la secretaría de Seguridad Pública de Sinaloa, se trata del golpe más importante a este rubro del narcotráfico en lo que va del año, pues estos tres laboratorios produjeron más de 17 millones de dosis, que en el mercado estadounidense podrían venderse hasta por 160 millones de dólares.

Las autoridades explicaron que el hallazgo de laboratorios se ha incrementado en los últimos meses gracias a operativos en los que el ejército utiliza nuevas tecnologías, como drones que identifican ondas de calor en áreas en las que no hay habitantes.

En lo que va del 2019, se han desmantelado 20 laboratorios en Sinaloa: 17 para metanfetamina, dos para fentanilo y uno para heroína.

El proceso para cada tipo de droga es muy diferente, puntualizó Cristóbal Castañeda, secretario de Seguridad Pública.

Para hacer heroína, "la goma de opio la mezclan con un químico", mientras que la producción de "fentanilo es en lugares cerrados y el proceso es sumamente más sencillo, pero más peligroso. Es una droga sumamente potente", explicó el funcionario.

El cártel de Sinaloa, fundado por el encarcelado Joaquín "Chapo" Guzmán, sigue dominando el estado del mismo nombre. Tras la caída de los precios de la marihuana por su legalización en algunos estados de Estados Unidos, el cártel se concentró en las drogas sintéticas.

En 2018 se desmantelaron siete laboratorios en Sinaloa, todos para producción de metanfetamina.

Estados Unidos, el mayor consumidor de drogas en el mundo, es un jugoso mercado para la metanfetamina, heroína, cocaína y fentanilo traficados a través de su frontera con México.

En 2017, unos 70.000 estadounidenses murieron por sobredosis de drogas, 10% más que en 2016, según cifras oficiales.

Últimamente, la mayoría de las muertes provienen de una nueva generación de drogas: los opiáceos sintéticos, como el fentanilo, decenas de veces más potente que la heroína. Unos 28.000 estadounidenses murieron en 2017 a causa del fentanilo o drogas similares.