Lo positivo, según Fusades, es que no mostró una personalidad confrontativa. / DEM


La Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades) destacó en un informe que hubo compromiso intermedio con la democracia de Salvador Sánchez Cerén en sus cinco años como presidente de El Salvador.

Fusades, en su informe denominada “El Salvador. Año Político”, establece que Sánchez fue respetuoso en su forma de Gobierno, ya que no intentó hacer cambios ni alteraciones contra la Sala de lo Constitucional o la Constitución de la República, como tratar de incluir la reelección presidencial indefinida.

El director de Estudios Políticos de Fusades, Luis Mario Rodríguez, dijo que Sánchez Cerén es señalado por guardar silencio ante expresiones de amenazas a libertades por parte de la Comisión Política de su partido, el FMLN.

En el análisis, se califica el Gobierno como “moderado y tolerante”, a diferencia de su antecesor, el expresidente Mauricio Funes, que mostró una personalidad confrontativa con adversarios políticos y críticos. Indicó que, a diferencia de Funes, Sánchez no utilizó su posición presidencial ni las instituciones del Estado como la Fiscalía General de la República para reprimir ni atacar a sus adversarios en la política.

Estableció que el mandatario mostró su disposición al diálogo a través de la creación de mesas, aunque también critican decisiones como brindar apoyo a los gobiernos que mantienen regímenes antidemocráticos como Vene­zuela, Cuba y Nicaragua.