Cinco de las granadas tenían el explosivo activo. / DEM


Unas 35 granadas heredadas del conflicto armado, 20 granadas para mortero y una mina Claymore, fueron destruidos ayer en el cantón Changallo de Ilopango, al oriente de San Salvador.

En total, la Policía Nacional Civil (PNC) aseguró haber destruido 56 explosivos que habían sido localizados en el país desde junio del 2019 a la fecha.

“Fueron encontrados en diferente calibre, numeración, granadas M67, granadas de humo, hasta cohetes Low”, dijo el comisionado Américo Pereira, jefe de la División de Armas y Explosivos (DAE), que dirigió el operativo.

La corporación también informó que de 25, de las 35 granadas de mano no servían y solo cinco estaban activas. La DAE abrió huecos de un metro de profundidad, para detonar los artefactos.

El comisionado Pereira agregó que los agentes hacen las detonaciones con el equipo que tienen y no con el que deberían y llamó a la población a no manipular explosivos, cuando estos sean encontrados, sino a llamar a las autoridades quienes están capacitados.