El 3 de marzo fue el Día Mundial de la Naturaleza, no aprovechamos la ocasión, para celebrar la belleza y la variedad de la flora y la fauna silvestre del país, muy poco se hizo, para crear conciencia acerca de los beneficios que tiene la conservación de estas formas de vida.

El cuido de la naturaleza es indispensable para tener un medio ambiente sano y equilibrado. La pérdida de estos recursos tiene implicaciones en el desarrollo de la población.

La naturaleza y la vida silvestre no se cuidan solas y la falta de conciencia de la población es una amenaza. Hay que detener la pérdida de la biodiversidad. Según fuentes noticiosas, en el territorio salvadoreño hay más de 150 especies de animales en peligro de extinción y más de 180 amenazadas, al igual que más de 150 especies de plantas en peligro de extinción. Esto es una alerta, hay que ir al rescate y conservación de la biodiversidad.

Entre las especies en peligro de extinción están: el caimán, el cocodrilo, la tortuga, el gavilán ceniza y pecho blanco, el colibrí, el puma, entre otros, al igual que árboles como el pino, mangle dulce, caoba, el cedro.

Otro tema de enorme preocupación es el del agua. Los datos son contundentes: ocho de cada diez salvadoreños están de acuerdo o muy de acuerdo con que el deterioro del medio ambiente es una razón por la que no hay suficiente agua en el país. Según un reciente estudio de la UCA: nueve de cada diez encuestados piensan que en El Salvador existe una crisis de agua.

El 90 % de las personas manifiestan su acuerdo con que “la población debe exigir su derecho a participar en las decisiones que las autoridades tomen sobre la administración del agua en el país” pero no se movilizan.

Los salvadoreños somos campeones en criticar, lamentarnos, en demandar y exigir pero poco nos ocupamos en informarnos, organizarnos y actuar para resolver los problemas que nos afectan. Ocho de cada diez compatriotas, conocen poco o nada sobre el trabajo que hace la Comisión de Medio Ambiente y Cambio Climático de la Asamblea Legislativa, de acuerdo con la última encuesta del Instituto de Opinión Pública de la UCA

Es impresionante que la población manifieste en dicha encuesta “que está muy preocupada porque dentro de poco tiempo ya no exista suficiente agua para todos en el país” y no se haga lo suficiente para cambiar esta realidad que nos alarma.

Urge la aprobación de la Ley General de Aguas, pero la discusión en la Asamblea Legislativa, avanza a paso de tortuga. La Comisión de Medio Ambiente solamente tiene aprobados ocho artículos de la Ley. Es muy poco y muy tarde. Son 14 años de atraso.

Toda la discusión sobre el agua debe llevarnos al río Lempa. Es la principal fuente de agua de El Salvador, el problema es que, a lo largo de todo su recorrido, el río recibe aguas negras, desechos de vertederos de basura, los residuos tóxicos del café y químicos usados en la agricultura, sin que se tomen las medidas para cambiar esta realidad. No hay que cansarse de repetirlo: El país no puede existir sin el río Lempa y no lo estamos cuidando.

Preservar el río Lempa es tarea de todos, hay que restaurar y reforestar el territorio nacional para proteger las zonas de recarga que alimentan las cabezas de las cuencas del río, cuidar los mantos acuíferos. Nunca es tarde para tomar las medidas para salvar al Lempa.

Lo más retador está por venir: Si al comenzar el invierno persiste la disminución de lluvia como se ha dado en años anteriores, por efectos del cambio climático que afecta la temporalidad y la espacialidad de las lluvias, esta situación nos va afectar grandemente.

El Día Mundial del Agua se va a celebrar el 22 de marzo y su principal objetivo es crear conciencia acerca de la importancia de cuidar el llamado oro líquido para la vida de los seres humanos y las especies en la Tierra; es la ocasión propicia para insistir en la necesidad de atender la situación, de una gran cantidad de personas, que no tienen acceso al suministro de agua potable.

Los sistemas de agua potable y saneamiento demandan de una especial atención para responder a los retos que plantean el abastecimiento, saneamiento básico y tratamiento de aguas residuales. Ojalá que el Día Mundial del Agua no pase desapercibido. El agua es un Derecho Humano y debe ser reconocido en la Constitución.