El 22 de abril fue designado por Naciones Unidas como el Día Internacional de la Madre Tierradesde 2009, aunque la fecha ya se había establecido desde los años 70 para expresar la preocupación mundial sobre la situación de nuestro planeta.

El Salvador es uno de los países más vulnerables del mundo, ambientalmente hablando. Cada año sufrimos fenómenos naturales que nos recuerdan nuestra fragilidad: terremotos, huracanes, inundaciones, deslaves, son tristemente parte de nuestras desgracias cada año.

Precisamente el cambio climático y esos desastres naturales generan también vulnerabilidad económica, pobreza y obligan a la migración. Gran parte de nuestra gente en el campo ha tenido que migrar ante las épocas de sequías, inundaciones y la pérdida de cultivos.

El Salvador es un país altamente vulnerable debido a la deforestación, a su precariedad ecológica, a la contaminación ambiental. Nos falta conciencia ambiental a nivel individual, desde pequeños gestos como depositar la basura en su lugar, ahorrar agua o sembrar árboles. El país también necesita mejorar su visión ambiental. La manera que se maneja la basura por ejemplo tiene que pasar a una visión integral de reciclaje. Los incentivos a energías renovables limpias deben ser prioridad, una política agropecuaria y forestal que genere empleos y la sosteniblidad alimentaria, las regulaciones sobre el uso de plásticos, todo eso debe ser prioridad para cuidar nuestro Medio Ambiente.

En el Día de la Tierra recordemos la necesidad de cuidar la naturaleza ahora, para seguir viviendo el mañana, para que nuestros hijos vivan en un planeta mejor.