Después de varios días , largas discusiones, análisis profundo, fuertes debates, La Sala de Constitucional resolvió decretar inconstitucionales las fases de reapertura económica lo cual deja sin efecto una reapertura paulatina, gradual y deja nuevamente a la Asamblea Legislativa y El Ejecutivo llegar a un acuerdo. Se repite el mismo escenario de hace meses.

La misma Sala basa su inconstitucionalidad es decir que el Ejecutivo ha violado derechos fundamentales ciudadanos como la libre circulación , derecho al trabajo , argumenta que, cuando se autorizan condiciones de fases de reapertura económica, declara que lo que está haciendo en realidad es prohibir la realización de actividades que trasgreden los derechos ciudadanos, sin embargo la Sala ignora que se trata de una pandemia una emergencia a nivel global donde el Ejecutivo tiene que tomar acciones para contrarrestar en este caso el contagio causado por el virus de Covid, Todos los Gobiernos han tomado acciones similares donde la salud y la vida es deber del Estado resguardarla y han puesto en práctica fases graduales de reapertura económica que les permita ir evaluando el comportamiento del virus para reaccionar rápido y parar, retroceder o avanzar en las fases subsiguientes.

La situación se torna muy complicada pues se tendrán que abrir de una sola vez comercios, servicios, y toda actividad que regularmente hacíamos antes de la pandemia lo cual peligra al incrementarse los contagios en un país donde somos irrespetuosos de las normas establecidas, es más nos cuesta acatar, cumplir , ser responsables y con poca empatía y solidaridad con nuestros semejantes, sin duda alguna los contagios aumentarán. No se dan cuenta los Magistrados de la Sala que dichas fases de reapertura pretendía ir bajando el número de contagios , descongestionar los hospitales y ganar tiempo para contener la expansión del virus. Al parecer la presión de sectores con interese particulares lograron sobreponerse sin pensar y sin importar las afectaciones a la mayoría. De hecho ya hay sectores que no respetaron ni siquiera la primera fase y se reactivaron lo que genera una reacción en cadena si este lo hizo yo porque no, diversos grupos se resisten a mantener el distanciamiento físico a lo cual no se acostumbran y realizan actividades donde se concentran varios el cual es un escenario propicio para propagar el virus.

Esta “liberación” de derechos constitucionales nos lleva a pensar como un sector como el transporte público no tendrá restringido el número de pasajeros que puedan subir y estarán libres de tomar o no acciones de protección al usuario donde bien sabemos que es un ambiente de fácil propagación del virus. Otro sector que preocupa es el educativo donde se deba actuar con sensatez y es aquí donde el Ministerio de Educación tendrá que decidir que hacer , es peligroso abrir las escuelas y permitir el retorno de estudiantes a las aulas, se trata de niños y jóvenes que si viene no están dentro de los más vulnerables para también viajan en bus , compran golosinas en las tiendas, y se les dificultará mantener distancia y hasta jugar en los recreos, maestros que padecen de enfermedades crónicas y otros factores que inciden.

Esta es la nueva “ normalidad” que nos ha mandado la Sala de lo Constitucional , no nos queda más que protegernos, seguir las normas recomendadas para evitar contagios y que Dios nos guarde