Al menos 12 civiles, todos miembros de una misma familia, murieron el viernes en bombardeos de la coalición internacional contra un pueblo bajo control del grupo yihadista Estado Islámico en el nordeste de Siria, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH).

"Ataques aéreos y disparos de artillería de la coalición internacional contra la localidad de Hidaj, controlada por el EI en el sector sur de la provincia de Hasaké, mataron a por lo menos 12 personas", precisó el OSDH.

Estos civiles, entre los que figuraban dos mujeres y sus hijos, pertenecían todos a una misma familia, precisó.

Según el OSDH, con estos son ya "20 los civiles muertos" bajo las bombas de la coalición "en 24 horas al este del Éufrates", agregó la organización establecida en Inglaterra y con una amplia red de fuentes en el país.

El jueves, otros ocho civiles, entre ellos tres niños, murieron en bombardeos atribuidos a la coalición en la provincia de Deir Ezzor, al sur de la de Hasaké.

Derrotado en importantes operaciones militares llevadas a cabo contra su "califato" autoproclamado en 2014 en una zona a caballo entre Irak y Siria, el EI controla ya menos del 3% del territorio sirio, sobre todo bolsones desérticos del centro y del este, según el OSDH.

En la provincia de Deir Ezzor, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) respaldadas por la coalición internacional intentan desalojar a los yihadistas de la orilla oriental del Éufrates.

Las FDS "ampliaron desde hace dos días la extensión geográfica de su ofensiva para incluir el sector sur de la provincia de Hasaké", dijo a la AFP el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.

La coalición antiyihadista señaló el viernes que sus ataques aéreos en Siria e Irak mataron "involuntariamente" a 892 civiles en casi cuatro años.

La guerra en Siria, que empezó en 2011 luego de la represión de manifestaciones pacíficas por parte del régimen, se fue volviendo más compleja con los años y con la implicación de múltiples actores en un territorio cada vez más fragmentado.

Desde el comienzo ha dejado unos 350.000 muertos y millones de desplazados y refugiados.