El sector de café y azúcar serían los “grandes ganadores” con un tratado de libre comercio (TLC) entre El Salvador y China, afirmó ayer el Ministerio de Economía (Minec).

La Embajada de China y el Gobierno salvadoreño anunciaron la semana pasada el inicio de negociaciones para un tratado comercial que, según aseguró el Minec, se buscará concretar en el menor tiempo posible, sin comprometerse con una fecha.

María Luisa Hayem, ministra de Economía, señaló que ya tienen los estudios de cuáles serían los sectores ganadores con un TLC, entre los que se destaca el azúcar y el café, que ya ingresan al gigante asiático sin preferencias arancelarias.

Actualmente, para enviar un contenedor de azúcar, los empresarios salvadoreños pagan un arancel de hasta 50 %, mientras que para el aromático es de 8 %, detalló la funcionaria en la entrevista matutina de Frente a Frente.

Sin embargo, el Banco Central de Reserva (BCR) reporta que en todo el año El Salvador no ha exportado azúcar a China, un mercado que en 2021 representó $67.6 millones para este sector.

Tras el reconocimiento de una sola China, en agosto de 2018, el país salió del TLC que tiene Taiwán con Centroamérica y uno de los sectores más afectados fue el azucarero por el riesgo de perder su cuota preferencial. Los datos oficiales indican, sin embargo, que los productores salvadoreños siguen enviando azúcar al mercado taiwanés con exportaciones que sumaron $2.8 millones a septiembre de 2022.

Las exportaciones de café, por su lado, siguen siendo minúsculas con apenas $115,556 a septiembre de 2022. En cambio, a Taiwán se enviaron en el mismo período un poco más de $1.16 millones.

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Hayem espera que con un TLC haya una “transacción que podría llegar a ser inmediata” de los bienes que ingresaban con preferencias arancelarias a Taiwán. Según la funcionaria, un tratado de libre comercio también abriría las oportunidades de exportación para los productores de carne porcina y camarones.

“Estamos viendo potencial para el sector plástico, para el sector de papel y cartón, manufactura; nosotros consideramos que será un ganador el de alimentos y bebidas”, agregó.

Un tratado comercial abre además las puertas a inversionistas y el Gobierno salvadoreño espera que los capitales chinos muestren apetito en los rubros de construcción, inmobiliarios y turismo.

China, el gran proveedor de bienes.

Mientras que El Salvador exporta azúcar, café y desperdicios de aluminio a China, el gigante asiático es el segundo proveedor para el mercado local de bienes de tecnología y maquinaría de manufactura.

La ministra de Economía reconoció que la balanza comercial se inclina hacia China con importaciones que a septiembre sumaron $2,198.9 millones, mientras que las exportaciones de bienes salvadoreños apenas representaron $4.5 millones. Es decir, que El Salvador le compra 478 veces más de lo que le vende.

Sin embargo, el Minec cree que el TLC abarataría los insumos traídos desde China y, por consiguiente, los costos para producir en El Salvador.

La semana pasada, la Corporación de Exportadores de El Salvador (Coexport) reconoció que un TLC con China es una apuesta de “futuro”, pero pidió al Gobierno tener cautela y considerar las asimetrías entre ambos mercados para no dejar en desventaja al sector productivo salvadoreño.