Estados Unidos declaró el viernes una emergencia de salud pública por el nuevo coronavirus originado en China y anunció que prohibirá temporalmente el ingreso de extranjeros que hayan viajado a ese país en las últimas dos semanas para evitar su propagación.

Además, cualquier ciudadano estadounidense que regrese de Hubei, la provincia china epicentro del brote del nuevo coronavirus 2019, estará sujeto a una cuarentena obligatoria de 14 días, anunció el secretario de Salud, Alex Azar, en una conferencia de prensa en la Casa Blanca.