Las mayores maniobras marítimas chinas en años incluyen unos 60 buques de guerra y 30 navíos de la guardia costera desplegados desde cerca de las islas del sur de Japón hasta el mar de China Meridional, dijo a la AFP un alto cargo de seguridad de Taiwán en condición de anonimato.
China también amplió la actividad militar aérea cerca de la isla, con 100 vuelos detectados en los últimos dos días, según el Ministerio de Defensa Nacional taiwanés.
Ni el gobierno chino ni su ejército se han pronunciado sobre este incremento de la actividad militar tanto en el mar de China Oriental, el estrecho de Taiwán, el mar de China Meridional o el Pacífico occidental.
En Taipéi estaban en alerta ante una posible represalia de China a la reciente gira por el Pacífico del presidente taiwanés, Lai Ching-te, que incluyó escalas en los territorios estadounidenses de Hawái y Guam.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Taipéi aseguró que esta actividad militar alrededor de la isla demostraba el carácter "alborotador" de China.
La portavoz diplomática de China, Mao Ning, replicó que "el daño a la paz y la estabilidad del estrecho de Taiwán es trabajo de las fuerzas separatistas independentistas de Taiwán, con apoyo de actores externos".
El oficial de seguridad dijo el miércoles que los planes chinos para una operación marítima masiva comenzaron en octubre enfocados a demostrar que Pekín puede aislar a Taiwán y a "trazar una línea roja" antes del inicio del próximo gobierno estadounidense, del presidente electo Donald Trump.
"China utiliza el viaje del presidente Lai al exterior como pretexto", aseguró el oficial.
"El verdadero objetivo parece ser establecer control en la primera cadena de islas y establecer una disuasión estratégica antes del cambio de mando en Estados Unidos", agregó.
La llamada primera cadena de islas incluye a Okinawa (Japón), Taiwán y Filipinas.
En sus maniobras, los navíos chinos simularon ataques a buques foráneos y bloqueos de rutas marítimas en las aguas alrededor de Taiwán.
Taiwán se considera una nación soberana, pero China la califica como parte de su territorio y no ha descartado el uso de la fuerza para retomarla un día.