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"El Muro"... El guardameta del Barcelona Marc-André Ter Stegen centra este miércoles los elogios como salvador de su equipo tras un partido de Liga de Campeones contra el Borussia Dortmund, en el que los azulgranas volvieron a sufrir lejos del Camp Nou.

Ter Stegen, en plena polémica en su país tras sus quejas por su situación de suplencia en su selección, paró un penal y apareció en varias ocasiones para detener el alud alemán en el Signal Iduna Park de Dortmund.

"Un colosal Ter Stegen, que paró un penalti, da al Barça un punto que por juego no mereció", escribe este miércoles en portada el diario Mundo Deportivo.

"Más que empatar, el Barça salvó un punto en Dortmund en un partido en el que estuvo bastante más cerca de perder que de ganar", escribe en su columna el director de Sport, Ernest Folch.

- 'Manos salvadoras' -

"Si el Barça salió vivo es porque por primera vez en este curso aparecieron las manos salvadoras de Ter Stegen", añade Folch.

Como le viene ocurriendo desde el inicio de la temporada en la Liga, el Barcelona volvió a mostrar su cara más apagada lejos del Camp Nou.

"La verdad es que ha sido disputado y hemos sufrido mucho. Hay que reconocerlo", afirmaba tras el encuentro el técnico azulgrana Ernesto Valverde, que no pudo más que rendirse también al efecto salvador de Ter Stegen.

Las intervenciones del guardameta eclipsaron la vuelta a los terrenos de juego del capitán Leo Messi, tras más de un mes lesionado en el gemelo de la pierna derecha.

El argentino entró al campo los últimos 30 minutos por la joven sensación Ansu Fati, a sus 16 años el jugador más joven en ser titular con el Barça en un partido de 'Champions', pero se le notó la falta de rodaje.

"Messi está todavía lejos de su mejor forma. Se le vio falto de chispa, déficit que saltó la vista en la última acción del partido, cuando estuvo lento para definir después de un buen pase de Suárez", escribe el diario AS.

- Falta de pegada lejos de casa -

El argentino no pudo remediar la falta de pegada que tuvo el martes el Barça en Dortmund, donde Luis Suárez siguió con su particular sequía goleadora europea lejos de Barcelona, y Antoine Griezmann sigue acoplándose a su nuevos compañeros.

"Es mi segundo mes desde que he llegado, tengo que acostumbrarme a pillar los movimientos de Leo (Messi), de Luis (Suárez)", afirmó el francés.

Goleador en casa, donde en Liga aplastó a Betis y Valencia (5-2), lejos de su estadio el Barcelona sólo ha marcado tres tantos en tres partidos oficiales saldados con dos empates y una derrota.

"Fuera de casa la gente presiona más, el rival en su casa está con más confianza, juega más fácil y al final nos cuesta a nosotros más tirar a puerta, crear ocasiones", se justificó el martes Griezmann, añadiendo que "hay que ver qué hacemos mal y trabajar".