Los precios del petróleo terminaron en orden disperso el viernes, tras la entrada en vigencia de un acuerdo que apunta a reducir drásticamente la producción de oro negro y evitar el derrumbe del mercado.

En Nueva York, el crudo estadounidense WTI -de referencia en El Salvador- para junio ganó 94 centavos, o 5%, para cerrar a 19,78 dólares. Se había disparado un 53% en total el miércoles y el jueves, al término de un mes caótico que vio el contrato para entrega en mayo aventurarse en territorio negativo.

En Londres, el barril de crudo de Brent del Mar del Norte para entrega en julio, primer día de uso como contrato de referencia, cayó 4 centavos, o 0,02%, para terminar en 26,44 dólares.

"El petróleo parece estar beneficiándose de la entrada en vigor de los recortes de la OPEP +", dijo Han Tan, de FXTM.

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus principales socios, unidos en la OPEP +, acordaron el 12 de abril una reducción en su producción de 9,7 millones de barriles por día (mbd) en dos meses, una medida excepcional que entró en vigencia este viernes.

La reducción se relajará gradualmente: será de 7,7 mbd de julio a diciembre y luego de 5,8 mbd de enero de 2021 a abril de 2022.

Fuera del acuerdo, Estados Unidos vio disminuir su producción por cuarta semana consecutiva, según las últimas cifras publicadas el miércoles por la Agencia Estadounidense de Información sobre Energía (EIA).

Noruega, el mayor productor de hidrocarburos de Europa occidental, anunció el miércoles una reducción de su producción hasta fin de año para contribuir también a la estabilización de los precios.

"Los precios seguirán siendo muy bajos y en las dos semanas próximas habrá otra vez una extrema volatilidad", pronosticó Craig Erlam, de Oanda.