El Salvador no mejora su perspectiva a nivel mundial en la adopción de nuevas tecnologías, así lo revela la última edición del Índice Global de Innovación (GII, por sus siglas en inglés), que lo coloca en la posición 104 y significa un peldaño más abajo del que ocupó en 2017.

El GII es elaborado cada año por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), la Universidad de Cornell y la Escuela de Negocios INSEAD. Evalúa a 126 economías a través de 80 indicadores en función de la presentación de solicitudes de derecho de propiedad intelectual, creación de aplicaciones móviles, gasto en educación, publicaciones científicas, entre otros.

Para la edición de 2018, se incluyeron los avances en la innovación energética, como en la producción, almacenamiento, distribución y consumo, bajo la primicia que en 2040 la demanda del mercado global requerirá hasta un 30 % más del indicador actual.

En este informe, El Salvador se ubicó en la posición 104, un peldaño más atrás que el ranking de 2017 cuando estuvo en la 103.

De América Latina, solo Honduras y Bolivia lo salvan de ser el peor evaluado, al ocupar la posición 105 y 117, respectivamente. La mejor calificación se la agenció Chile en el peldaño 47, Costa Rica en la 54 y México en la 56.

Visto desde la región centroamericana, a Costa Rica le sigue Panamá en la escala 70 y Guatemala en la 102. Nicaragua no figura en este indicador por no poseer datos para comparar, indicó la OMPI.

Cada vez más, estudios internacionales consideran el tema de innovación dentro de sus indicadores. Así, por ejemplo, el último Informe de Competitividad Global, del Foro Económico Mundial (FEM), modificó su metodología para medir cómo están preparadas las economías para enfrentarse a la cuarta revolución industrial.

Uno de los pilares que mide ese informe es la capacidad de innovación y colocó a El Salvador en la posición 123 de los 140 países que considera. A nivel mundial, el FEM encontró una “relativa debilidad generalizada en el dominio del proceso de innovación, desde la generación de ideas hasta la comercialización de productos”, indica su reporte.

 

¿Cómo figura El Salvador?

 

Instituciones

Uno de los pilares que mide el informe es la salud del sistema institucional, que considera el ambiente político, estabilidad política y seguridad, efectividad del Gobierno, entorno y calidad regulatoria y Estado de derecho. El Salvador ocupa la posición 85.

 

Capital humano

En este indicador, El Salvador se colocó en la posición 103. Mide el gasto en educación como porcentaje del PIB, financiamiento del Gobierno por alumnos de segundaria, esperanza de vida, licenciaturas en ciencias e ingeniería, investigación y desarrollo de matemática.

 

Modernización

El país se colocó en la posición 86. A nivel mundial se mide qué tanto conocen los trabajadores y su participación como porcentaje del PIB, además si las empresas ofrecen capacitación final, mujeres contratadas con títulos avanzados, investigación entre unidad e industria, por mencionar.

 

Infraestructura

Considera la participación y uso de las tecnologías de la información y la comunicación, así como servicios del Gobierno en línea, la potencia eléctrica, sostenibilidad ecológica, formación bruta dentro del PIB y certificaciones ecológicas. El país está en la posición 102 de este indicador.

 

Activos

Este indicador evalúa marcas por origen, diseños industriales, creación de modelos, bienes y servicios creativos, además de exportaciones de servicios culturales, largometrajes nacionales, impresión de medios y creación de aplicaciones. El país ocupa la posición 90.