El embajador de la Unión Europea en El Salvador, Andreu Bassols, aseguró ayer que un sistema sólido de pesos y contrapesos es “fundamental para la democracia salvadoreña”, y dijo estar “convencido” de la madurez de los órganos del Estado para respetarse unos a otros.

La presión del presidente de la República, Nayib Bukele, para aprobar una reforma para pagar bonos a policías; la creación de una Comisión Especial en la Asamblea para indagar acusaciones de un funcionario del Ejecutivo; y la superación de un veto para el pago de plazas de médicos, provocaron que ambos poderes vertieran acusaciones sobre el irrespeto a las funciones del otro.

Ante este escenario, un grupo de diputados jóvenes pidió ayer, en una reunión con embajadores de la UE, un pronunciamiento por el respeto a la institucionalidad y expresaron su preocupación sobre “voces disidentes” que llaman a la insurrección para disolver la Asamblea Legislativa, explicó Marcela Villatoro, diputada de Arena.

En declaraciones posteriores a la prensa, Bassols aseguró que la UE “siempre ha apoyado la institucionalidad, la legalidad y la necesidad de reforzar el Estado de Derecho sobre la base de los pesos y contrapesos de distintas instituciones; lo que es fundamental en la democracia salvadoreña”.

Aseguró que como bloque están “convencidos que la democracia salvadoreña es lo suficientemente fuerte y madura como para que esto sea así, para que haya respeto por parte de todos los poderes del Estado”.